La reciente muerte del maestro plástico Pérez Celis produce un vacío referido al mundo artístico por su jerarquía en toda el área de la especialidad pero, particularmente, quiero referirme a su vinculación con Roca y las labores que realizó tanto en Casa de la Cultura -cuando me encontraba al frente de la misma como coordinador general, en la década de los setenta- como en su rol docente en el Instituto Universitario Patagónico de las Artes (IUPA) en el 2000.

Cuando tenía quince años, Pérez Celis vivió un tiempo aquí, adonde llegó con el ánimo de trabajar en la fruta, aunque finalmente hizo otras tareas ya que no contaba con conocimientos en ese ámbito. Años después volvería ya consagrado para enseñar en el Taller Escuela de Casa de la Cultura, viviendo varios meses en esta ciudad como un artista reconocido. En algunos lugares han quedado trabajos que él hizo durante ese período e inclusive, para mi orgullo y placer, conservo obras dedicadas que prestigian las paredes de mi casa.

Tuve la oportunidad de hablar largo y tendido con él al llamarlo a fin de año para saludarlo con ese motivo, en el que finalmente fue el último contacto y equivalió a una despedida después de tantos encuentros y largas conversaciones mantenidas en cenas en mi casa.

Sintetizó su opinión acerca de la relación con los medios de comunicación en una entrevista con la revista "Cuadernos" de la Fundación Cultural Patagonia, donde expresó: "Algún día habrá que hacer un estudio más profundo de por qué alguien es popular. Porque yo no es que haga una pintura fácil, yo no pinto banquitos ni placitas; sin embargo la gente me conoce, que acá además adentro de la elite, entre comillas, cultural, tiene su precio. A menos que uno tuviera el dinero de una multinacional, uno puede hacer popular a alguien, entonces por eso digo que hay connotaciones quizás más profundas de pensar por qué uno es popular y otro no, porque hay muchos pintores que aparecen en televisión y, sin embargo, no los co

noce nadie. Pienso que en mí tiene que ver que siempre fui muy respetuoso de los medios de comunicación porque llegan a lugares que muchas veces esa gente que no puede acercarse a una galería, a un museo y mucho menos al estudio de un pintor puede llegar. Independientemente de lo que hacía con la pintura, si se me presentaba algún medio, yo lo respetaba y lo respeto y trato de ser lo más claro posible porque sé que esto representa mi sutil llegada a lugares donde mi obra posiblemente no llega. Son naturalezas distintas; hay artistas a los que les cuesta comunicarse y son grandes artistas igual".

En la misma publicación, explicando por qué se es artista, expresaba: "Hay algo que generalmente mueve a una persona desde muy joven, a pesar de todos los problemas que puedan ir apareciendo en el camino, porque es artista, fundamentalmente entre otras cosas, aquel que supera todos los inconvenientes que hay entre él y la obra, inconvenientes de todo tipo: psicológicos, físicos, anímicos y económicos. Siempre hay, todos tenemos inconvenientes, pero solamente aquellos que los van superando a medida que se van presentando son los que llegan a ser artistas. Pero ¿por qué nos supera? Porque es una pasión mucho más fuerte que cualquier otra cosa".

Respecto del IUPA decía: "El arte es lo único que hace permanente al ser humano. Por eso me parece muy importante la actitud del IUPA, que va mucho más allá del entretenimiento ya que un pueblo empieza a permanecer en la historia cuando realmente respeta su arte, su cultura. Toda esta gente que está estudiando acá, vaya a saber hacia dónde va a llevarlos el camino de Roca, que no era lo mismo cuando nada de esto existía".

Por sus valores artísticos y personales, así como docentes, su ausencia deja un vacío para todos en el ámbito de la belleza y, personalmente, en el afectivo, además de compartir con los demás la admiración artística.

Termino con el elogio, puede ser exagerado, que tuvo respecto de mi obra, que es válido para todos los que en todos los tiempos desempeñaron funciones y sin cuya capacidad, dedicación y afecto institucional no habría sido posible. Decía en el medio citado: "Sería importante que algunos imiten actitudes como en este caso la de 'Tilo' Rajneri, que crea una Ciudad de las Artes para que las generaciones que vienen puedan tener información importante a pesar de los inconvenientes que se les presenten, entendiendo que no es sólo en beneficio de una provincia, de una ciudad, sino que es un beneficio para todo el país. Ojalá hubiera este tipo de cosas en el resto de la Argentina. Son todavía hechos aislados, pero tenemos que verlo desde el punto de vista de que no todo está perdido y de que hay hechos positivos".

Gracias, en mi nombre y en el de toda la comunidad educativa, por tu generosa opinión, que no impide la sensación de desamparo por tu ausencia.

NORBERTO "TILO" RAJNERI

Especial para "Río Negro"