Tal vez le llegó la hora a España. Eterna favorita frustrada, la ‘Furia Roja’ ha dado un paso gigante ayer para despojarse de la maldición que la acompaña desde que ganó la Eurocopa en 1964, su primer y único  trofeo.
Lo hizo ante Italia, último campeón del mundo, al que nunca había vencido en el gran escenario.
Luego de 120 minutos sin desequilibrio, España estuvo más certera en la definición por penales, y además se valió de las manos de Iker Casillas (detuvo dos disparos) para superar la barrera traumática: los cuartos de final, algo que no lograba desde la Eurocopa 1984.
“En los penales tuve un poco de suerte", dijo “San Iker”, que fue declarado mejor jugador del partido por la UEFA. “Estamos contentos por haber dado una alegría al país. ¿Que si pensamos en el título? Sí, pero por lo logrado, pasar de los malditos cuartos, ya es un triunfo en sí mismo”, dijo Casillas. 
Ahora España tiene la oportunidad de buscar su tercera final del torneo, después haber llegado en 1964, cuando ganó el título en Madrid a la Unión Soviética por 2-1, y en’84 cuando perdió ante Francia en París por 2-0.
“Estoy contento, pero sólo hemos ganado una pequeña batalla. Pienso que los penales hicieron justicia. Tuvimos dos o tres ocasiones más que ellos, aunque ellos pusieron un ritmo de movimiento de balón que no nos beneficiaba y nos crearon problemas por alto”, resumió por su parte el DT español Luis Aragonés.
El jueves lo espera Rusia en semifinales, el equipo al que España goleó por 4-1, el 14 de junio en Innsbruck. Pero de eso hace muchos días y los jóvenes rusos han mejorado y son la sorpresa.
Después de derrotar a la favorita Italia, será el equipo de Hiddink el rival a batir para asumir esa posición de candidato al título. Es otro papel, uno nuevo para España, que ya puede pensar en ganar la Eurocopa.