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Tras varios faltazos, el funcionario explicó a pobladores del Ñirihuau las características de la explotación petrolera. Dijo que aún no hay nada adjudicado y que desafectaron cuencas que vuelcan al Nahuel Huapi.
Oscar Echeverría, titular del Consejo Provincial de Medio Ambiente (Codema), fue citado en varias oportunidades por pobladores de la región de los lagos que manifiestan inquietud ante los derrames de petróleo en arroyos que vuelcan sus aguas en el Nahuel Huapi y por una virtual concesión del área para su exploración y explotación. Debido a la falta de respuestas, la última vez fue requerido vía carta documento. El funcionario fue y explicó cuál es la posición de su repartición ante los hechos.
-¿La UTE interesada en explorar la zona está integrada por Repsol y Pluspetrol?
-Sí, pero todavía no hay nada adjudicado. No hay certeza de la existencia; hay indicios. Las certezas las dará la empresa que explore el área. El área estaba concesionada por el gobierno nacional y en el 2007 el gobierno provincial consiguió revertirla, por eso la licitó. Nosotros hicimos una evaluación ambiental en el 2006, una inspección del área con cantidad de análisis que fueron incorporados al pliego de licitación. Al revertir se estableció que la empresa que ganara la licitación tenía que hacerse cargo de la remediación de los manaderos naturales y la de los pozos que están abiertos desde 1916. Le explicamos a la gente cómo seguirá el proceso a partir de que Hidrocarburos adjudique el área formal y legalmente. El día en que haya una empresa privada allí, tiene la obligación de hacer el cierre definitivo -en el marco de la resolución 5 de la Secretaría de Energía- de los pozos y manaderos naturales que hay, obra que tiene un costo aproximado de 200.000 dólares.
-¿Se desafectaron de la licitación dos cuencas que vuelcan en el Nahuel Huapi?
-Se desafectaron dos cuencas que vuelcan en el Nahuel, dos cuencas chiquititas, por pedido de Parques Nacionales. Una es la del arroyo Las Minas y la otra es un arroyo sin nombre, equivalentes a un 4% del total del área.
-¿Estamos hablando de un área protegida?
-No, y está fuera de Parques Nacionales. La Buitrera no está dentro del área licitada.
-En tanto los manaderos sigan brotando, ¿hay peligro de contaminación del Nahuel Huapi?
-Desafectamos de la licitación dos cuencas que son las que vuelcan al Huapi y el proceso que se sigue es, primero, la remediación del área. Una vez remediados los pozos la empresa tiene que presentar al Codema un estudio de base ambiental. Ese estudio debemos llevarlo a Bariloche para aprobarlo. Se trata de una evaluación del ecosistema de toda el área y allí se analizan los recursos existentes y los ecosistemas en su funcionamiento. A partir de eso, si se aprueba, la empresa tiene que cumplir con un plan de protección ambiental, compromisos que asume la compañía de manera general para la forma de exploración y, eventualmente, explotación. Nos comprometimos también a realizar una audiencia pública.
-¿Se comprometieron a hacer un cierre provisorio de los pozos antes de las nevadas?
-Sí, pero la etapa de exploración es una cosa y la de explotación, otra. Si la empresa gana la licitación para explorar y ésta, según el pliego de licitación, sólo puede ser geoquímica en el 80%, estamos ante un proceso que no afectaría el medio ambiente.
-¿Qué hace en este momento la Subsecretaría de Hidrocarburos?
-Evalúa la oferta desde el punto de vista económico y legal.
-¿Y tiene en cuenta el valor intrínseco de este lugar o eso es competencia de ustedes?
-Hoy ponerse a discutir cuestiones ambientales sin tener un estudio es inútil.
-Otra de las críticas que se formulan hacia el Estado es que los estudios de impacto ambiental los hacen las empresas interesadas o que el Estado no tiene recursos para hacerlos y cumplir con su rol de guarda.
-Es el marco legal existente. Te recuerdo que Calcatreu lo desaprobamos en base al estudio de impacto, no a la ley de prohibición de la utilización de cianuro. El gobernador firmó el año pasado un recurso fiduciario para que el sector petrolero aporte fondos para el control de la actividad; es decir, no creo que haya una falencia por parte del Estado, pero es un problema comunicar las cosas que se hacen bien.
-Es un problema suyo, en todo caso.
-¡Manejamos unos 50 estudios de impacto ambiental por mes! Nos faltan recursos humanos, es cierto, pero lo que hacemos lo hacemos bien.
-Hay dos áreas susceptibles de ser exploradas en la provincia, Ñirihuau y la Meseta de Somuncura, ambas con valor natural y turístico y similares cuestionamientos.
-En Somuncura terminamos el plan de manejo y dejamos claramente expresados los lugares donde no se pueden hacer determinadas actividades, entre ellas, la explotación hidrocarburífera. El desarrollo hidrocarburífero no lo decide el Codema. Mi obligación es velar para que las actividades que se realizan no afecten el medio ambiente. Nosotros pusimos en funcionamiento Alpat y podemos demostrar, en función de los monitoreos y auditorías que hacemos, que no hay afectación del medio; si vos discutías esto antes de que se pusiera en funcionamiento, esa planta nunca iba a funcionar.
-¿Qué quiere decir?
-Mi función es defender que el medio no sea afectado.
-Bueno, la gente no está preguntándose cuánto va a dejar una explotación de gas en concepto de regalías...
-Los pobladores de la zona, y esto no lo digo con maldad, cuando viene una petrolera y ven lo que pueden cobrar como superficiarios dejan de estar en contra. Muchos de los que hoy están en contra van a estar a favor.
-Hay mucha gente que eligió ese lugar para vivir por su pureza, es decir, va a cuidar el medio ambiente...
-Bueno, acá ya nos metemos en el debate de la actividad. Primero, no es lo mismo que hace 20 años y muchos daños que tiene la provincia o el país son históricos, anteriores a YPF; el río Colorado es un ejemplo: hoy no tenemos una afectación del río como teníamos hace 15 años. Cuando en 1992 se privatizaron las áreas petroleras, se las dieron a empresas privadas y se les empezó a exigir desde el Estado el cumplimiento de la legislación existente que antes no se respetaba, vimos que la situación ambiental de la provincia cambió notablemente.
-¿Cómo explica el DPA a la gente que si cae petróleo en el agua ésta no está contaminada?
-Cuando en el 2006 hicimos análisis de hidrocarburos en agua nos dieron bien. Esta discusión sobre si afecta o no el recurso la resolvimos en la primera reunión, independientemente de esos resultados, que se los entregamos a pobladores y la Comunidad del Limay y de los cuales aún no recibimos ninguna respuesta o reparo. ¿Qué resolvimos? Hacer una obra de contención del hidrocarburo para que no siga llegando al arroyo Las Minas. Luego, la empresa Geociencia, de Graciela Pozzo Ardizzi, especializada en este tema de remediación, se hará cargo de la obra.
-¿La gente de Bariloche puede estar tranquila con este tema?
-Por nuestra parte sí; hasta nos comprometimos a instalar en el área de Bariloche una oficina del Codema para trabajar de modo más ejecutivo.
-¿Qué le responde a la defensora del Pueblo, quien lo acusó de desconocer su función?
-Es una apreciación de la defensora. No estamos en el gobierno para oponernos a todo, no soy Greenpeace dentro del gobierno.
SUSANA YAPPERT