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Enfrentar una demanda creciente con un presupuesto en \"terapia\" | ||
Las limitaciones de la obra social para cubrir nuevas prestaciones, la falta de un programa claro y el peso de los fallos judiciales fueron debatidos en Viedma. |
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El avance médico se contrapone con las limitaciones presupuestarias. La oferta -prestaciones- se transforma en demanda -afiliado- para la obra social. Falta un claro programa sobre hacia dónde va el Ipross. El menú prestacional hoy está planteado por los jueces -por la resolución de amparos-. Éstas son algunas algunas opiniones recogidas en el debate acerca del "Presente y futuro" del Ipross realizado el último martes en Viedma. El encuentro -organizado por "Río Negro"- contó con las exposiciones del presidente de la obra social, Alcides Pinazo; del economista y consultor Alfredo Zgaib y del auditor privado César Marina. Sus primeras definiciones originaron una interesante discusión. -¿Cómo está el Ipross frente a otras obras sociales en relación con las prestaciones? -requirió Adriana Gutiérrez, hoy legisladora pero anteriormente presidenta del Ipross. Marina evitó precisiones, pero consideró que el menú prestacional está actualmente ligado al mandato de los jueces con sus resoluciones de amparos. Esa respuesta cerró este debate público que expuso nuevos interrogantes y enfoques. Buena parte del análisis versó sobre el modelo a elegir. El ministro José Luis Rodríguez les planteó a Marina y a Zgaib el interrogante sobre cuál es el mejor, desde su punto de vista. -No hay recetas, hay que adaptarse a la realidad. Las obras sociales son mecanismos de financiación y protección de la salud, a no ser que pretendan ser otra cosa. Lo que necesita Viedma puede ser distinto de lo que necesita la Línea Sur -respondió Marina. Luego, el legislador Facundo López (Encuentro) consideró que esa consulta debía ser planteada a Pinazo como responsable del Ipross.
TENDENCIAS ACTUALES El presidente reconoció que en Río Negro existe "una tendencia a la capitación. Eso es lo que más fácil nos sale. Más allá de que se estén firmando convenios nuevos, todos se van a volver a revisar si es necesario. El sistema de cápita es más claro aún con las deficiencias administrativas", admitió. Pinazo reconoció que al día siguiente firmaría un convenio con el Colegio de Viedma con un esquema mixto, por prestaciones con un límite de pago. Sergio Wisky -que es secretario técnico del Ipross- sostuvo que una de las problemáticas serias es que hay "150.000 afiliados y se necesitarían 150 generalistas que no están". Advirtió que la oferta -prestacional- suele transformarse en demanda a la obra social. En ese sentido, Marina y Zgaib coincidieron en que es el poder, el gobierno, el que establece las reglas de juego y debe definir cuál es el modelo a tomar, consultando y abriendo el debate pero sin resignar su rol. A lo dicho Pinazo agregó que "existe una relación cultural entre paciente y médico; no es sólo una cuestión de poder. Hay que analizar estrategias, de prepo no se va a poder hacer nada", sostuvo. El médico Cristian Gorriti, uno de los accionistas de la Clínica Viedma, planteó su posición: "Ver la forma de pago cuando todavía no se sabe en qué modelo estamos es poner el carro adelante del caballo. La forma de pago es una cuestión técnica y no decide el sistema de salud". Agregó que "sin información es imposible cambiar las cosas y no se puede controlar".
RECLAMO DE LOS AFILIADOS Norma García transmitió una visión de los afiliados: "El pueblo no está representado en el Ipross. Acá es muy interesante el debate, pero la realidad es que mañana tenemos un problema de salud y padecemos la obra social porque son todos impedimentos. Ser paciente y afiliado al Ipross es muy duro en Río Negro", afirmó la mujer claramente compungida. Luego el titular de Unter, Marcelo Nervi, consideró que no hay actitud de cambiar por parte de la actual conducción y encuadró esa conclusión en el rechazo de la participación de sectores gremiales. Insistió en que se mantiene una idéntica decisión política, mientras cuestionó la presidencia de Pinazo. La respuesta del presidente no se hizo esperar: calificó de ingrata a la Unter porque el Ipross responde a sus solicitudes prestacionales. Nervi lo contrarrestó y le pidió que cumpliera con el fallo judicial por el cual Pinazo se comprometió a la regularización de los reintegros. Marina y Zgaib insistieron en el rol de planificación de la obra social, mientras lamentaron que no existe o que no está claro. Esa definición se potenció frente a otra coincidencia expuesta: no hay presupuesto suficiente para la atención prestacional. También salieron a la luz otras posturas: "El Ipross nunca te abandona. No hay que olvidarse de que el Ipross tiene un sistema solidario", reivindicó el gremialista Pedro Bichara. Una realidad que también machacó otro de los presentes, el vocal gubernamental de la obra social Remigio Romera.
AGENCIA VIEDMA rnredaccionviedma@yahoo.com.ar |
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