El presidente del Ente Provincial de Energía del Neuquén, Alejandro Nicola, reconoce que uno de los grandes problemas de la empresa que conduce es la deuda de las cooperativas.

Por eso en esta entrevista admite que los aportes del Estado compensan ese desequilibrio.

La prioridad del EPEN para este año es la repotenciación de las estaciones transformadoras, que es el punto más débil del sistema eléctrico neuquino. El gobierno de Jorge Sapag decidió financiar todas las inversiones que hagan falta, contó en esta entrevista el presidente de la empresa estatal de luz, Alejandro Nicola.

-Su asunción en la presidencia del EPEN debe haber sido sencilla, porque usted ya estaba en la empresa.

-Vengo ocupando posiciones gerenciales, razón por la cual conozco todo su funcionamiento. Fui gerente de explotación desde el 2002 hasta el 2004 y luego, gerente de Ingeniería y Planeamiento hasta diciembre pasado. Ingresé en el EPEN en 1990, a través de un concurso del área de Planeamiento. Estuve ocho meses como director de Energía Eléctrica (de la provincia), con la expectativa de hacer planificación. No tuve posibilidades de hacer nada y volví al EPEN; con Nicolás Salvatori (entonces era presidente del ente) le dimos rango de gerencia al planeamiento. Hoy la gerencia de Ingeniería está trabajando en obras que planeamos nosotros. Tenemos ya la segunda versión del plan de trabajo 2007-2009. Analizamos por cada estación transformadora la demanda que tenemos y cuál será en el futuro. Avanzamos en proyectos y en licitaciones, y hoy la situación es bastante buena porque estamos con la compra de transformadores, que son elementos vitales para nosotros, por más de 13.000.000 de pesos. Hay transformadores de potencia en 132 kilovoltios y otros en 33. Son para toda la provincia, pero los más significativos son lo que corresponden a la estación Gran Neuquén.

-Esto viene de la gestión anterior.

-Es lo que venimos planificando. La compra se inició a finales del año pasado. En Gran Neuquén ya se terminó de montar un transformador de 30 MVA (megavoltio amperio), con lo que pasamos de tener dos de 30 a tener tres de 30 MVA. Con eso zafamos del problema en Neuquén capital.

-¿Con esto se acaban los problemas en la ciudad de Neuquén?

-No. No diría que es un parche, pero hicimos lo que pudimos porque tuvimos una controversia grande con el municipio y con CALF, que fue pública. No nos pusimos de acuerdo; hemos tenido criterios distintos. Llevamos adelante una discusión y posterior negociación en el ámbito de la Secretaría de Energía de la Nación y el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE).

Nosotros fuimos con los cuadros técnicos del EPEN y CALF y el municipio, con asesores de Buenos Aires. Y finalmente tanto el ENRE como la Secretaría de Energía dijeron que el EPEN tiene razón. Estamos cobrando una tarifa regulada por el ENRE y gracias a que eso se resolvió pudimos avanzar en las obras que estaban haciendo falta para Neuquén.

-¿Las están haciendo ustedes como empresa o el gobierno de la provincia?

-En este caso, el EPEN. Estamos comprando dos transformadores para Gran Neuquén.

-¿Para la ciudad de Neuquén?

-Neuquén solamente. Sacamos dos de 30 MVA y ponemos dos de 45.

-¿Y los dos que sacan de Gran Neuquén?

-Van a Centenario. Entonces, duplicamos la potencia de las dos estaciones transformadoras.

-¿Y con la estación Valentina, que abastece Plottier, qué van a hacer?

-Ya compramos un transformador de 15 MVA por decisión del gobernador Sapag. Le presenté un cuadro de situación de abastecimiento y fue una de las primeras decisiones que tomamos. Se va a duplicar la potencia actual. Pero el problema del abastecimiento de Plottier ha sido mucho más complejo que el de Neuquén, donde se resolvió en una mesa discusión.

-Pero lo que pasa es que no podrían llevar a la cooperativa de Plottier al ENRE...

-Pero además el problema es mucho más complejo. Ahora estamos resolviendo el problema de la deuda. El gobierno provincial va a tener que asistir a Plottier para resolverlo de manera definitiva, pero eso tiene que estar atado a que se resuelvan todos

los problemas de la cooperativa y el servicio, porque el objetivo...

-...y la tarifa.

-Y la tarifa. Porque el objetivo es que el servicio se preste en las condiciones que merecen los usuarios.

-Claro que el costo del nuevo equipo para la estación transformadora no se va a trasladar a la cooperativa.

-Debería pagarlo la cooperativa y en el bosquejo que hacemos estamos buscando la manera de que el EPEN le financie a muy largo plazo todas las obras. Estamos hablando de un aporte pequeño de forma mensual y de que al final del camino, cuando veamos por cuánto han sido todas las inversiones, veamos cómo se salda el resto. Pero ya el EPEN ha hecho inversiones importantes en esa estación para salir de la crisis que había

este verano. Nosotros montamos un transformador nuestro, con lo cual no hubo problemas de abastecimiento. Por otro lado, tenemos ya planificado construir una estación de rebaje de 33 a 13,2 en la zona de Los Canales.

-Ahí hay un problema, porque la cooperativa le dio la factibilidad a Los Canales, que tendrá una demanda enorme.

-No conozco los detalles, pero estiman en unos años llegar a los 5 ó 6 megavatios (MW). Haríamos una subestación para que la cooperativa tenga otro punto de suministro.

-¿Y eso quién lo paga?

-Estamos viendo con la gente de Los Canales, a ver quién lo paga. Cuando hay inversiones en expansión, si no está en la tarifa hay que ver quién asume el costo. Cuando nosotros prestamos el

servicio de PAFT (prestación adicional de la función técnica del transporte) tenemos la obligación de asumir las inversiones porque están incluidas, pero esto es "distro", entonces hay que analizarlo.

-En Neuquén es más complejo. El presidente de CALF, Marcos Silva, puso en duda que el EPEN fuera a cumplir con sus inversiones. De todos modos, ¿basta con las inversiones del EPEN o es preciso una contraparte de la cooperativa?

-Con las obras que estamos haciendo no hay dudas de que se soluciona. En Alto Valle cambiamos todas las celdas, que era un compromiso con Uniren cuyo acuerdo no está firmado; estaba a la firma de la presidenta pero ahora lo mandaron de vuelta porque cambió el ministro de Economía.

-¿Entonces ese aumento todavía no lo pueden aplicar?

-No, eso lo aplica directamente en ENRE.

-Volvamos a Neuquén.

-Lo que tenemos diseñado, y ya está en CALF para que nos dé su opinión, es una nueva estación transformadora en la zona noreste, Alta Barda. Son obras que, desde la definición hasta la ejecución, pueden pasar cinco años.

-En el gobierno anterior se diseñó un plan de obras públicas por 750.000.000 de pesos que no tiene ni una instalación eléctrica. ¿Qué lectura hace de eso?

-Me llamó la atención que no estuviera la obra de abastecimiento a Villa La Angostura porque el EPEN tiene un déficit anual de 11.000.000 de pesos por atender con generación aislada muchas localidades, y el 85% de esa cifra es Villa La Angostura. Estamos hablando de 10.000.000 de déficit por año. La obra la teníamos estimada en 45.000.000 de pesos, es

decir que el repago era en cinco años. Sorprendió que no figurara; nosotros la pedimos, pero en la primera versión de la ley no estaba; luego se intentó, pero tampoco. Lo mismo pasó en Añelo, cuya subestación está recargada.

-¿La "línea petrolera" está en funcionamiento?

-La doble terna está en servicio desde diciembre.

-¿Liberó la red?

-Mejora la confiabilidad del sistema y permite mayor capacidad de transmisión.

-¿Este sistema radial que tienen las líneas de Neuquén no es poco confiable?

-Estamos planteando dos cuestiones. La confiabilidad tenemos que lograrla a partir de transformar las redes radiales en redes malladas. Hay que duplicar puntos de abastecimiento, de transformación. Lo que también estamos haciendo es crear una cuadrilla de trabajos de contención para poder hacer mantenimiento sin realizar cortes. Los problemas más grandes serían llegar a Villa La Angostura, Villa Traful y la zona costera del Limay (en Alicura), donde hay generación aislada y demanda insatisfecha. Tenemos la idea de venir desde Piedra del Águila a Junín de los Andes en 132 kV y cerrar un anillo en el sur. Hay decisión del gobernador para avanzar en una línea de 132 kV entre Cerro Bandera y Aluminé porque la capacidad de la de 33 kV está comprometida. Estamos hablando de obras por 30.000.000 de pesos. El otro tema que tenemos bastante analizado es el anillo en la zona noroeste que nos resuelva el problema de abastecimiento de Loncopué, Caviahue, El Huecú y llegar con un segundo punto de abastecimiento a Chos Malal. Con estas obras Neuquén tiene resuelto el problema en alta tensión de los próximos 20 ó 30 años.

-¿Qué inversión se precisa para todas esas obras y las menores que conforman el plan integral?

-Nuestro plan es de 132.000.000 de dólares, pero a cuatro años. Y hay algunas que pueden ser alternativas.

-¿Cómo cerró los números el año pasado el EPEN?

-Nuestro problema básicamente es la deuda. Presenté al inicio de la gestión el presupuesto de recursos y gastos, y para que cerrara teníamos que contar con que el gobierno se hiciera cargo de la deuda de Copelco y que la provincia asumiera algunas obras, como la de Moquehue, además de que financiara la compra de los transformadores a cambio de una compensación de deudas del EPAS.

-¿Con lo que ingresa por todas las unidades de negocio del EPEN es superavitario?

-Este año me da 130.000 pesos positivos, sobre 240.000.000 del total. Es un presupuesto equilibrado.

-¿Si pudieran cobrarles en tiempo y forma a las cooperativas dejaría de ser necesario que la provincia financie las inversiones?

-Una parte sí. Porque el problema que afronta el EPEN es que hay muchas obras de muy baja rentabilidad. Piense que con una línea de 132 kV se resuelve el problema de Aluminé, Moquehue y Villa Pehuenia, y capaz que con la misma línea en otro lugar resuelvo el problema de 500 veces más usuarios. La ecuación económica de algunas obras no cierra y no se puede pretender que el EPEN lo recupere en la tarifa porque sería una muy alta.

-Si a Villa La Angostura se le trasladara el costo de la interconexión, podrían decir que Zapala nunca pagó la suya.

-Es cierto. Pero hay obras que son para llegar con el abastecimiento y hay otras que son por seguridad. (AN)