ara evitar las fisuras en hormigones o morteros los especialistas recomiendan ahora la utilización de fibras sintéticas cuya materia prima es el polipropileno virgen.
Se las utiliza como refuerzo tridimensional secundario, y al mezclarse con los distintos elementos del hormigón las fibras se distribuyen en todas direcciones “deteniendo las fisuras en su estado microscópico, evitando su propagación y la creación de futuros problemas derivados del agrietamiento”.
Según afirman “con la incorporación de las fibras se incrementa la resistencia a la tracción, abrasión, impacto y flexión.
Se sugiere su aplicación entre otros en: premoldeados de hormigón, pavimentos, revoques proyectados, pisos industriales y solados de hormigón en general”.
Este producto tiene una dispersión, totalmente homogénea y tridimensional, alcanzando una compactación máxima, asegurando el refuerzo del hormigón evitando el desarrollo de las microfisuras.
De acuerdo a los especialistas, cuando se compara las fibras de polipropileno fibriladas, con las mallas, se debería observar el costo versus beneficio.
El costo de material en si, para una losa de 10 centímetros, es casi igual pero el aplicador no tiene que hacer gastos adicionales en obreros, almacenaje y desperdicios como es el caso con la malla.
Según el mismo razonamiento las fibras de polipropileno pueden producir un número de beneficios sobre la utilización de mallas sin costos adicionales, ya que reemplazan las mallas metálicas, reduce el costo de mano de obra, elimina daños por corrosión, así como accidentes relacionados con el manejo, etc.
El hormigón fresco inmediatamente comienza a hidratarse y a perder agua a través de sistemas capilares que ocasiona la migración de humedad a la superficie exterior.
A medida que el agua migra y se evapora van quedando espacios vacíos y la masa del hormigón comienza a retraerse.
Una rápida evaporación podría ocasionar esfuerzos de retracción que llegan a exceder la resistencia a la tensión del hormigón fresco.
En este punto, las micro grietas que se forman producen un debilitamiento a través de toda la losa. A medida que la matriz continúa retrayéndose las micro grietas se propagan y se vuelven más grandes y visibles.
Las grietas de cualquier dimensión, no sólo reducen la calidad y durabilidad del hormigón sino también lo hacen estéticamente inaceptable.
A medida que la matriz continúa retrayéndose las micro grietas se propagan y se vuelven más grandes y visibles.
Históricamente las mallas soldadas han sido utilizadas principalmente como refuerzo de resistencia y también como refuerzo secundario para controlar el agrietamiento por retracción.
Sin embargo, en la práctica, la colocación o la suspensión de la malla en el lugar indicado es raramente lograda.
Aunque se logre colocar correctamente, afirman que “las mallas solamente mantienen el hormigón unido después de que éste se ha agrietado.
Aunque se logre colocar correctamente,
las mallas solamente mantienen el hormigón unido después que éste se ha agrietado.
Existen dos variantes de fibras de polipropileno, una fibra tramada llamada POLICEMENTO®F y la otra es una microfibra sin tramar llamada POLICEMENTO® MF.