Respecto de la carta enviada el pasado 2 de enero por el señor Tomás Heger Wagner, me permito hacer las siguientes reflexiones:

1) Cuando tal vez por ideología, por íntimo convencimiento, se tiene una visión tan sesgada de la realidad y de la historia, como la manifestada por el señor Heger Wagner, es menester aclarar posiciones, pues de esa manera evitaré quedar como mero lector avalando con mi silencio actitudes que no comparto en absoluto.

2) Hace mención en su carta a la "casa de altos estudios", así entrecomillado; esto es, nuestra Universidad Nacional del Comahue, donde muchos egresamos y muchos lo harán por generaciones. Denoto allí un sesgo irónico que intenta descalificar, y lo logra, obviamente. Sí deseo reafirmar que la universidad estatal a la que alude es la universidad pública que supimos conseguir.

3) Luego, en un esfuerzo intelectual denodado por relacionar pintadas en la Universidad con formación de los jóvenes, ataca la figura del "Che" Guevara utilizando, peyorativamente, términos de claro estilo provocador: si el Che es ese que conceptualiza, es decir, un adalid de la violencia y de la muerte, más el aditamento de faccioso, apelando a la lógica, ¿no está avalando el período anterior a él, es decir, la tiranía de Fulgencio Batista? Creo que el mismo sentimiento lo embargará cuando los símbolos sean la hoz y el martillo y aun la rosa socialista. Las fachadas de las universidades no estuvieron pintadas en períodos que coincidieron con las etapas más sangrientas de nuestra historia.

4) Que los jóvenes que asisten a la universidad expresen su reconocimiento al Che no debiera ser una novedad, porque el contexto histórico en que se desarrolló su accionar constituye una bisagra, tanto para África que aún sufría los últimos estertores del colonialismo, como para América Latina, tierra pródiga en golpes militares, y para el mundo. Para no abundar en detalles, simplemente recordar las intensas jornadas del Mayo francés y la brutal represión en la Plaza de Tlatelolco en México, represión que aún hoy se está investigando. Como contrapartida, la matanza de My Lai en Vietnam, perpetrada por Estados Unidos. Era el despertar de la rebeldía que en nuestro país tuvo su correlato con el "Cordobazo" y otros "azos" acá en la región, rebeldía por las tremendas injusticias y los autoritarismos, en un mundo que aún hoy lucha para erradicarlos, pero que tuvo en aquellas jornadas su cenit. Por otro lado, si tales manifestaciones de apoyo, o no, no se realizan en la universidad, que es el ámbito en donde se forman nuestros jóvenes no sólo para su saber específico sino como futura clase dirigente, intelectual o política, ¿cuál es el ámbito? Ahora, una aclaración, las remeras del Che, que sin distinción de clases sociales, visten nuestros jóvenes y no tan jóvenes y ¡en todo el mundo! deben llamarle, por lo menos, la atención, a la par de ser un excelente negocio para quienes lejos están de ser sus admiradores.

5) Con respecto a nuestros patriotas que forjaron el ser nacional, los clásicos, San Martín y Belgrano, con los cuales todos coincidimos, tal vez hayan desaparecido de los despachos oficiales. Hay tantos para agregar, se me ocurre uno: Castelli, casi olvidado, seguro hoy tildado de extremista y, sin embargo, un verdadero héroe tapado por la historia oficial a planos muy inferiores. Moreno, aunque tal vez todavía, no demasiado "digerido"; Sarmiento, que merecería largas horas de debate para englobarlo como tal... Yo agregaría a todos los héroes anónimos y no tanto que lucharon y luchan por un país más justo y que han pasado y pasarán literalmente al olvido, entre ellos, y sólo para mencionar a algunos, el doctor Laureano Maradona, el padre Mugica, el obispo Angelelli, el Dr. Favaloro, Scalabrini Ortiz, Osvaldo Bayer, Don Jaime? Como reflexión final: aunque no es argentino, pero sí latinoamericano, el aula magna de nuestra universidad pública lleva el nombre de Salvador Allende, el presidente inmolado en La Moneda, el primero en América del Sur que intentó denodadamente instaurar un socialismo democrático, barrido por las huestes asesinas de Pinochet y sus aliados del Norte, como siempre?

Néstor Andrés D. Podio

DNI 10.701.872

Neuquén