Históricamente la Región Andina ha sido una zona de conflictos recurrentes entre Estados e inestabilidad interna desde la formación y evolución de los actuales territorios nacionales en el siglo XIX: Guerra del Pacífico, disputas recurrentes entre Ecuador y Perú; escalada diplomática y militar entre Chile, Perú y Bolivia; la presencia de organizaciones guerrilleras, paramilitares y narcotráfico en Colombia. La Región Andina desde principios del siglo XXI se ha embarcado en un gasto significativo en la adquisición de sistemas de armas (clásica carrera armamentista), Chile, Colombia, Venezuela y en menor medida Perú y Ecuador. El conflicto entre Colombia y Venezuela reúne denominadores de una "Guerra fría", al percibirse una lucha en los campos: de la política (mantener y aumentar la influencia en la región), de la ideología (populismo de izquierda revolucionario vs. conservadurismo de derecha), de lo militar (carrera armamentista-disuasión-uso de la fuerza militar) y de lo económico (socialismo vs. capitalismo).

Lo más trascendente en el conflicto entre Colombia y Venezuela no está dado por un reclamo de soberanía territorial, surge por acusaciones mutuas de injerencias internas (presencia de militares estadounidenses en Colombia y potencial colaboración de Venezuela con las FARC). El juego de alianzas está presente, esto es uno de los elementos que lo hacen un "conflicto clásico", a saber: Venezuela cuenta con el abastecimiento de armas de Rusia, el apoyo político e ideológico de Bolivia y Ecuador y ¿cooperación militar de las FARC? Por su parte Colombia cuenta con la ayuda política e ideológica y militar de Estados Unidos y solidaridad acentuada por parte del Perú.

Un posible escenario a mediano plazo llevaría a una mediación por parte de Brasil, Argentina y Chile, en un conflicto que derivaría en un enfrentamiento clásico de fuerzas armadas, donde las principales acciones bélicas serían por parte de los ejércitos y fuerzas aéreas.

Presentaría un alto nivel de dificultad identificar el "Estado agresor" para la opinión pública internacional, por las acusaciones mutuas entre Colombia y Venezuela. De esta forma, estos dos países estarían en condiciones de hacer uso del derecho a la guerra (legítimo uso de la fuerza militar contra el "Estado agresor"), invocando el artículo 51 de la Carta de la ONU que hace referencia al derecho de legítima defensa.

En toda negociación se necesita la voluntad de todas las partes. Para ir a la guerra se necesita una sola voluntad.

Félix Gabriel Guzmán, DNI 20.793.634

Neuquén