Tenemos un campo en la zona de Pichi Mahuida, a unos 50 kilómetros de General Conesa (provincia de Río Negro). Esta zona está, según ley 22.913 conforme con los certificados extendidos por la provincia, en desastre agropecuario. Esto significa que hemos perdido más del 80% de nuestro capital de trabajo, lo que diríamos agonía ganadera. Tenemos los beneficios provinciales del Impuesto Inmobiliario del campo y Patente del Automotor, vehículo destinado a dicho fin, y hasta donde sabíamos una prórroga o condonación de deuda del Impuesto a la Ganancia Mínima Presunta. Fuimos al Banco de la Nación Argentina, sucursal General Conesa, y nos informaron que la cuenta corriente estaba bloqueada por la AFIP por el Impuesto a la Ganancia Mínima Presunta, algo que tratamos de entender ya que nosotros en el 2008 tuvimos pérdidas por el desastre agropecuario, situación que se mantendrá hasta tanto podamos reponer el stock de hacienda, cosa que calculamos entre 3 ó 4 años. El próximo paso era esperar el expediente y hacer el descargo que correspondía. Para ello solicitamos el pago con el Plan Mis Facilidades y a los tres días nos informaron que se había levantado el bloqueo de la cuenta corriente. Pero ¡oh sorpresa! sacaron el dinero de la Ganancia Mínima Presunta, más gastos jurídicos, intereses resarcitorios y punitorios, y días después llegó el expediente. Suponemos que esto es legal, pero ¿no es un robo?

En el 2008 fuimos víctimas de un asalto muy violento, por lo que decidimos no tener dinero en casa y lo depositamos en el banco. Conclusión: nos roban los ladrones o el gobierno. Nos hacen acordar a las pirañas, donde ven una miga se amontonan y la devoran.

Elena Nikolajuk, LC 3.951.563

Conesa