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"Acostumbrados a pedir todo al Estado" | ||
Como es de público conocimiento, por diversas razones uno de cada dos neuquinos no fue a votar. Muchos de estos votantes ausentes justificaron su actitud en la ineptitud, incapacidad e inmoralidad de la clase dirigente, quejándose de la falta de propuestas u otras alternativas. Las expresiones generales han sido "Más de lo mismo", "Esto no cambia más"... Yo me pregunto si estas personas que no votaron participan en la vida social de su comunidad. Es fácil criticar al político, pero si no participamos continuaremos dándoles la oportunidad de seguir haciendo las cosas que les criticamos. ¿Alguna de estas personas que no votaron participa en alguna escuela, en una cooperadora, en algún club de barrio? ¿Colabora con alguna ONG para mejorar la vida de sus hijos y semejantes, trabaja en alguna biblioteca? ¿Comparte con sus hijos actividades deportivas o culturales? Las comisiones directivas de las instituciones civiles (clubes, bibliotecas, federaciones) se ven en figurillas para conformar sus grupos de trabajo debido al poco interés en participar. Nos hemos acostumbrado a pedirle todo al Estado, convirtiéndonos en parásitos. Las palabras sacrificio, trabajo, respeto, educación, solidaridad y consenso ya no pertenecen a nuestro vocabulario. Hoy las suplantamos por exigir, luchar, combatir, dádiva, subsidio, expropiación, estatización, ganar y perder. Debemos criticar proponiendo; si queremos cambiar, ¡participemos! Conozco a mucha gente de más de cincuenta con tiempo suficiente, capaz e inteligente que podría aportar su experiencia en distintos ámbitos. Pertenezco a este grupo y les aseguro que todavía tenemos mucho para dar. Hay muchas instituciones con carencias no sólo materiales? Hagamos un pacto. Aportemos algo de nuestro tiempo en las cooperadoras, clubes, hospitales y juntas vecinales; demostremos que somos útiles y capaces y luego exijamos a nuestros representantes el cumplimiento de sus promesas. Nuestros políticos son el fiel reflejo de nosotros mismos: si somos una sociedad indiferente, así serán nuestros representantes, pero con todo el poder. Y el poder que ejercen debemos controlarlo participando al menos en el control de sus acciones públicas. Por eso es importante la participación, porque las decisiones mal tomadas inexorablemente nos afectarán, tarde o temprano. Hay muchas cosas para hacer, sólo falta saber dónde y tener la voluntad de hacerlo, por los demás y por nosotros mismos. Ricardo Dougall DNI 10.532.537 Neuquén |
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