¿Cómo puedo expresar la indignación que tengo ante la desidia, discriminación o ignorancia puesta de manifiesto en este acto? El domingo 20/9/09 por la tarde iba llegando a la terminal Zapala, por calle Primera Junta, antes está el edificio del museo Olsacher, y vi con sorpresa que el flamante director, Dr. Alberto Garrido, estaba lavando los vidrios del frente, como si fuera "un empleado o un ama de casa". Le pregunté por qué estaba haciendo esa tarea, a lo que me contestó que no tenía gente que lo hiciera y el tiempo corría (al día siguiente se reabría el museo). Se lo veía muy cansado...

Pero esto no terminó ahí. Mi esposo (ex director del museo Carmen Funes de Plaza Huincul) fue invitado a la ceremonia del día siguiente. A su regreso estaba disgustado y sorprendido. Conoce al Dr. Alberto Garrido desde jovencito y sabe de su capacidad y trayectoria... No podía creer que no sólo se lo ignorara en las invitaciones que se distribuyeron, las que firmaban el Ing. Guillermo Cocco y el Lic. Carlos Portilla y no se mencionaba para nada al director del museo, sino que tampoco disertó en el acto. Para colmo, alguien que lo mencionó en su discurso le dijo "licenciado". Cerca de mi esposo estaba la madre del Dr. Garrido, quien preguntó: "¿Por qué licenciado, si es doctor?"... pero como nadie registró su presencia, tampoco se le contestó.

Quisiera saber por qué tanta falta de "reconocimiento". El Dr. Garrido es una personalidad, que ocupa hoy ese lugar por ser un profesional destacado. Basta entrar a internet "doctorandos" y podremos informarnos de su trayectoria y su carrera, realizada en la Universidad de Córdoba.

No merece este trato. Claro que su grandeza y humildad no le permiten reaccionar ante la ignorancia o la envidia de quienes lo rodean... Pero Dios es justo y sabrá cómo ayudarlo...

Betty López, DNI 4.163.723

Zapala