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"¿Todavía alguien no entiende el porqué argentino?"

"Debemos educar al soberano" (D. F. Sarmiento) cita Rubén Cisneros en su carta de lectores del 6 de septiembre que comparto. De lo que no se percató don Faustino es de que antes deberíamos educar al que "se siente soberano", o sea el elegido por el pueblo, ergo nuestro presidente, no nuestro rey, no nuestro monarca absolutista.

¿A qué voy ? Veamos: éstos son sólo algunos de lo textos del libro "Evita" -año 1947, presidencia de Perón- que, aprobado por el Ministerio de Educación como material de lectura para primer grado, se dictaba en las escuelas. Fotos del general y su mujer en las primeras hojas. "Mi hermanita y yo amamos a mamá, papá, Perón y Evi-ta". "Esa niña juega con una muñeca. Se la regaló Evita. Para ella es la más linda". Regalos: "Los niños recibieron los juguetes que les envió Evita. Yolanda, Inés, Zoilo y Ubaldo están contentísimos. ´Qué buena es la señora de Perón´, dice Ubaldo". Qué hermoso sueño: "Cholita sue-ña que le regalan una gallinita blanca, una blusita de seda y una camita blanda. Cuando se despierta se pone triste, no tiene nada. Escribe una carta. A los pocos días un ángel le manda la gallinita blanca, blusita de seda y camita blanda. Cholita sonríe de felicidad y murmura: ´¡Evita, Evita!´". Cielito de Juan Perón: "Cielito que canta el criollo con un temblor en la voz, hoy aramos tierra nuestra por J. D. Perón. Cielito que lleva el viento y recorre la nación: hoy somos más argentinos por J. D. Perón".

Transitando el libro se leen loas a las conquistas sociales -y ciertas- de la presidencia. Se compara al general con próceres de la talla de San Martín y Belgrano, se publican párrafos de "La razón de mi vida". Fotos de Perón y esposa adornan varios de los textos. Todo esto denota que, más allá de la dudosa calidad educativa, en la pareja no se destacaban precisamente la humildad o la modestia y sí buscar continuidad de un absolutismo enfermizo y peligroso.

Si bien menciona las bondades del trabajo como método de crecimiento, lo que inculca permanentemente es la cultura del regalo, de la obtención de distintos bienes y valores sin el sacrificio necesario para justificarlos, para resaltar, claro, la bondad manifiesta de Eva (pedí = tenés). Y aquí radica el quid de la herencia peronista para el país. Se regaló el pescado en lugar de enseñar a pescar, como bien dice Cisneros en su carta.

El sindicalismo peronista confundió las necesarias e importantes conquistas sociales y, alentados por JDP y sucesores, hicieron un culto del no trabajo y el reclamo imperativo. Más adelante les agregaron la corrupción económica y política inédita (73/76 - Isabel/López Rega, que justificó democráticamente la posterior masacre militar) como complemento necesario, que no fueron ni son de ningún modo ajenas a los presidentes que el justicialismo brindó (Menem, los K y secuaces son dos claros botones de esa muestra corrupta). Fue en aquellos años cuando se pudo haber parido una Argentina distinta de la de hoy, apuntando más seriamente a la educación y a la honestidad laboral. El escenario-país era único e irrepetible, con cultura de trabajo y sacrificio, importadas por nuestros abuelos inmigrantes llegados de naciones masacradas por las guerras. Pero si "Evita" era el libro de lectura que iniciaba a los infantes en los albores de su educación y "La razón de mi vida" y "Cultura ciudadana", obligatorios en el secundario, mal podríamos esperar un crecimiento intelectual independiente de aquellos niños y adolescentes. Los admiradores de ese sistema educativo y de sus nefastos resultados son hoy los reyes de Argentina y el pueblo, sus vasallos. Con una presidenta que emula todo lo de aquella supuesta abanderada de los humildes, lenguaje, gestualidad, joyas, riqueza, ropa carísima e inalcanzable para aquellos descamisados que se supone representa o representaba su espejo, y siempre con dinero ajeno, claro, acentuando la imitación. ¿Alguna mera coincidencia? ¿Pura casualidad o causalidad? ¿Todavía alguien no entiende el porqué argentino?

Hugo Capellán, DNI 11.208.763 - Cipolletti



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