Carta abierta a la presidenta de la Nación, Dra. Cristina Fernández de Kirchner:

Me dirijo a usted con el respeto que se merece como máxima autoridad de este país.

El 31 de enero del corriente año me asesinaron cruelmente a mi hija, de 17 años recién cumplidos, en su habitación de la planta alta de nuestro domicilio.

Ella era toda alegría, solidaridad, amiga, estudiante.

Ella era mujer como usted, como yo, como tantas argentinas.

Ella daba y recibía amor, como muchas mujeres.

Ella era solidaria con todos, sin distinciones, como dice nuestra Constitución.

Ella era amiga, de esas incondicionales, como muchas en esta tierra.

Ella era estudiante, excelente alumna, desde el jardín de infantes, como muchos jóvenes.

Ella tenía una meta por cumplir: "médica forense", que no tengo dudas que la hubiera cumplido porque todo lo que se proponía lo lograba con mucha voluntad y esfuerzo.

Pero esa noche un inmigrante, que gozaba de nuestros mismos derechos, le truncó su vida y paralizó la mía, la de mi familia y la de todos sus amigos.

Señora presidenta, estas cualidades no las digo como mamá, las puede escuchar por todo un pueblo.

Mi hija compartía juegos, alegrías y peleas con sus hermanos como tantos otros adolescentes.

Mi hija respetaba y adoraba a su familia, como en otros hogares.

Mi hija no conoció una salida de noche con sus amigos, como los jóvenes actuales.

Mi hija no paseaba por su ciudad, su país y el mundo como lo hacen "algunos".

Mi hija estudiaba con mucho sacrificio y en escuela pública, como miles de argentinos.

Mi hija no tenía custodia particular como la suya.

Mi hija era vida, luz, sol.

Le pido a usted como mujer, mamá y presidenta de todos los argentinos que eleve lo antes posible al Congreso nacional un proyecto de ley para reformar el Código Penal y que sean castigados fuertemente quienes quitan vida.

Le pregunto: ¿qué haría usted si, en vez de mi hija, fuera la suya? ¿Le gustaría ver al asesino algún día caminar por este país, sin tener a su lado lo más valioso que nos dio la vida, nuestros hijos?

Creo que las obras públicas, el turismo, la industria, etcétera, son importantes en la población, pero la más importante de las obras es la vida.

Espero que trabaje para ello, suplicándole una pronta repuesta.

Alicia Dora Fernández

DNI 12.979.318

Mamá de Agostina Y. Mazzina

Fernández Oro