No me refiero al dengue sino a la extraordinaria proliferación de pseudoterapias, cada vez más absurdas, que avanzan ante la pasividad de las autoridades que deberían defender la salud de la población combatiendo estas estafas desalmadas.

Alarma comprobar hasta qué extremos llega esta plaga consentida: invade todos los ámbitos y se publicita en todos los medios de difusión, incluyendo los del Estado, con el descaro producto de la segura impunidad. Baste el siguiente botón de muestra: en Radio Nacional de El Bolsón, a un programa del Hospital de Área local llamado "Educar en salud" (¡!) se invitó hace poco a una persona a la que la presentadora atribuyó el título de "doctora" y que empleó todo el tiempo en hablarnos de lo maravilloso que es el reiki, del poder sanador de la magnetopuntura y de las flores de Bach, de lo útiles que son las imágenes "kirlian" como método de diagnóstico, de lo importante que es buscar una conjunción planetaria propicia para la curación, etcétera, etcétera. Debo añadir que este tipo de dislates no es ninguna excepción en nuestra Radio Nacional.

¿Cuánta gente interrumpe -o no inicia- un tratamiento médico adecuado para ser esquilmada con estas charlatanerías? ¿Qué decir del silencio vergonzoso de los colegios médicos?

Jorge A. Gastaldi

DNI 10.608.748

El Bolsón