Para qué voy a gastar estos preciados renglones defenestrando al gobierno provincial, aunque se lo merezca.

Con la verdad le retruco a cualquiera y creo que con eso basta para sintetizar la desagradable e ineficaz gestión del gobierno actual. Por eso me voy a centrar en los protagonistas de esta historia, esas personas simples que salieron a reclamar por un salario digno, por igual remuneración por igual trabajo, por el tan nombrado 82% móvil, por lo que es suyo... no hace falta adivinar, son los docentes del piquete en Chichinales.

Se preguntarán por qué tan exaltada mi denominación y quizá hasta nieguen esta afirmación, pero sepan que reconocerán que estoy en lo cierto.

Un prócer es aquel que lucha por sus ideales y convicciones, aquel que nunca da un paso atrás, que cree en un país próspero lleno de oportunidades, que da su vida por su gente, que lucha y en la adversidad sigue con la frente bien alta. Éstas son las características que analógicamente y con todo respeto a la historia les asigno a esos piqueteros de guardapolvo que resistieron el agobiante calor y el frío de las noches, que abandonaron sus casas dejando a sus familias y partieron llenos de esperanza en obtener una solución a este conflicto, esos que no bajan los brazos (a pesar de que el gobierno haya demorado una respuesta). Por eso y mucho más se merecen esta calificación. Tuve la inigualable experiencia de haber acompañado a los docentes en Chichinales y lo sigo haciendo desde el ´95, cuando salieron a luchar por los meses impagos, y quizá desde antes también ya que soy hijo y hermano de docentes.

Ni se imaginan lo que fue ver a mi mamá Mirta, de 54 años, y a mi maestra de jardín sosteniendo una bandera argentina a un mes del piquete, gritando y saltando como si fuese el primer día, porque estuvieron desde el primer día... tanta impotencia por tener un gobierno que es un perfecto desastre y a la vez sentir la fuerza que seguro tomaré como ejemplo para mi vida.

También quiero felicitar a la Unter por ser tan batalladora y no dejar que pisoteen a sus afiliados y no afiliados, porque lo que consiguen los agremiados en base a la política del gremio beneficia a todos y cada uno de los docentes de esta provincia.

Por eso y por el orgullo que siento de sentirme parte del gremio, ¡fuerza compañeros!

Matías Andrés Páez, DNI 30.284.585 - Roca