El Estado rionegrino tiene una demanda judicial desde agosto del 2008 cuyo objeto es revocar el subsidio que se le acuerda a la Asociación Mutual de Servicios Educativos Estación Limay -escuela AMSE Estación Limay de Cipolletti- y que se disponga por lo tanto el cese de los aportes o la cooperación económica que dicho establecimiento educativo percibe por todo concepto del Estado provincial. Dicha demanda fue interpuesta porque el Estado provincial subsidia a este colegio que tiene un accionar discriminatorio cuando es la propia Constitución provincial la que establece en su artículo 63 inciso 6 que "la ley reglamenta la cooperación económica del Estado sólo en aquellas escuelas públicas de gestión privada, gratuitas, que cumplan una función social, no discriminatoria y demás requisitos que se fijen".

Tuvimos que recurrir a la Justicia ante la falta de control y de respuestas por parte del Consejo Provincial de Educación, el gobernador y el fiscal de Estado, quienes no contestaron nuestro reclamo.

Quien crea que detrás de esta demanda hay intenciones de beneficio económico personal está muy equivocado. El juicio es de derechos humanos y nos patrocina la Dra. María Angélica Acosta Mezza -capacitada en el tema en el Centro de Estudios Legales y Sociales de Capital Federal, presidido por Horacio Verbitsky-.

El juicio no persigue obtener ninguna suma de dinero sino defender la dignidad de nuestra quinta hija Bianca -con síndrome de Down- y, en su nombre, la de todos los niños y jóvenes como ella, así como también hacer cumplir las leyes que protegen sus derechos.

Queremos que haya una lección ejemplificadora para que nunca más suceda esto.

Queremos que se deje de subsidiar con el bolsillo de todos los rionegrinos a una institución educativa que no respeta las leyes ni a las personas.

Quien acepte que su hijo/a reciba esa clase de educación y de valores, que se la pague de su propio bolsillo.

Quien crea que esperamos a irnos de AMSE Estación Limay para denunciar su política educativa también está muy equivocado. Queremos que nuestros cinco hijos tengan dignidad, sean personas de bien, con don de gente y valores. Desde el inicio y mientras nuestros hijos estaban en dicha institución hicimos intervenir y denunciamos el accionar de la escuela al Inadi y al Inaes, propusimos una audiencia pública en Cipolletti, hicimos una denuncia ante el ministro César Barbeito y la Comisión Interpoderes en presencia de padres de niños integrados de toda la provincia de Río Negro y enviamos innumerables cartas de lectores en este medio y al ministro José Luis Rodríguez y la directora de Enseñanza Privada.

La escuela ya reconoció haber hecho una asamblea el 17/12/04 para ver si se respetaría el derecho humano de Bianca a educarse; también reconoció que hizo constar en la Memoria Anual 2004 -y se la envió a cada socio- que Bianca asistía a la escuela porque los obligaba el CPE. Dicen lamentar que no nos guste su forma de redactar. Tampoco niegan haberle buscado lugar en el Jardín Nº 28 de Neuquén capital sin nuestro consentimiento y de acuerdo con la directora de ese lugar.

Asimismo, reconocieron que para los demás alumnos en nivel primario la institución le paga a una maestra integradora doble turno desde el 2003, siendo que Bianca sólo recibía ayuda de una maestra integradora estatal -de la escuela especial- durante una hora dos veces por semana.

Mientras tanto, un sector privilegiado de la sociedad cipoleña tiene clases todos los días y continúa recibiendo un subsidio de miles de pesos por mes por no discriminar y por compromiso social. A pesar de todo lo relatado, no faltan adultos involucrados que se hagan los ofendidos. A más de uno les duele el bolsillo. A nosotros, el alma.

Viviana Janneth Romera

DNI 14.598.711

José María Fabi

DNI 13.483.324

Cipolletti