Cuando el actual secretario de gobierno municipal asumió su cargo en diciembre del 2007 de la mano de una coalición que amontonaba partidos de los más diversos, se hacía responsable de obligaciones, compromisos y deberes por los próximos cuatro años, o sea hasta el 2011. Párrafo aparte requiere aclarar que no son compromisos o deberes descartables, que a su criterio o antojo puede asumir o hacerse cargo cuando quiera o por el lapso de tiempo que le parezca. La obligación la tiene con la gente y con la institucionalidad como secretario de gobierno municipal, no con sus ambiciones o anhelos personales. Las obligaciones de un gobernante van más allá de las cuestiones personales.

Eso es lo que demuestra la candidatura de Mansilla a concejal por la ciudad y la percepción que de la política se tiene. Los compromisos son poco serios, las obligaciones las atiende por el tiempo que le parece justo y el respeto a los compromisos asumidos quedan de lado cuando las circunstancias presentan una coyuntura que puede ser favorable o no. Si con esa ligereza afronta los compromisos sociales, ¿podría ser un buen concejal? Para mí no.

Secretario de gobierno Mariano Mansilla, ha transcurrido un año de su gestión al lado del intendente Farizano. Le quedan tres años para gestionar la ciudad y cumplir con las promesas de campaña. Todos tenemos muy presente el spot publicitario en el que frente a una cámara hacia mención a la construcción de viviendas por 20.000 pesos (parece que leyó a García Márquez y se contagió del máximo exponente del realismo mágico), que al día de la fecha brillan por su ausencia o, mejor dicho, al día de la fecha gran parte de la población las sigue esperando?

Mi humilde consejo, por más que no compartamos ni comulguemos las mismas ideas políticas y las formas de manejarnos en la vida, es que cumpla sus obligaciones, asuma sus responsabilidades y se dedique a trabajar para lo que fue designado por el intendente Farizano: mejorar la ciudad.

Si tratara de dejar de lado situaciones que involucran a su actividad privada, sería distinto y no nos involucraríamos en cuestiones privadas. Pero ésa no es la situación y la ciudadanía no debe renegar de la irresponsabilidad en la clase dirigente. Sea responsable con la voluntad popular y muéstrele respeto al pueblo.

Guido Pedro Bruveris

DNI 31.478.006 - Neuquén