Una historia no tiene comienzo ni fin: arbitrariamente se elige el momento desde el cual mirar hacia atrás o hacia adelante... ¡me jubilé!

Treinta y siete, casi treinta y ocho años de docente... comencé en la década del '70 en la Escuela Comercial Nocturna Nº 3 (hoy CEM 73) y en la Escuela Normal Mixta (hoy CEM 1). Desde entonces, y hasta el 31 de julio último, di clases en casi todas las escuelas primarias y secundarias de Allen, J. J. Gómez, General Roca, Mosconi, Cervantes y Mainqué.

Quien esté leyendo este raconto dirá: "Si yo tuve a la seño Edhita o a la profe Edhit", ¡y tendrá alguna que otra anécdota para recordar!

Tengo presente a los primeros alumnos, aquellos con los que compartí en el '72 las barricadas del Rocazo (nuestra pueblada, ya olvidada). A los que me brindaron su apoyo cuando fui prescindida del '76 al '84 y a los últimos que se emocionaron con mi despedida de las aulas. Siempre trabajé en los 3 turnos, 5 y 7 escuelas (profesora-taxi), trasladándome en bicicleta o colectivo, pasando de una escuela a otra, con lluvia y mucho frío, desde las 6 de la mañana a las 12 de la noche, asumiendo con responsabilidad y compromiso mi profesión.

Más de uno recordará que les decía: "Chicos, yo vengo a trabajar, no a cobrar un sueldo...", cuando no querían hacer nada en el último módulo de los nocturnos o a la 7ma hora de los viernes.

Hoy, mis primeros alumnos son padres con diversos oficios y/o profesionales, también fui maestra o profesora de sus hijos. Con satisfacción, educadora de dos generaciones que me saludan y reconocen en la calle, el supermercado, la oficina, "Usted fue profesora mía en..., yo soy...,¿se acuerda?".

A todos mis gracias por haberme permitido ser parte de una etapa de formación, de aprendizaje y compartir vivencias tan enriquecedoras y les digo: "Que cada día sea un sueño, que se pueda tocar. Que cada día sea amor, que se pueda sentir. Que cada día sea una razón para vivir". Y a mis colegas, a cada desafío hay que decirle:"Sí, puedo" (aunque los trabajadores de la educación no estamos valorizados en su real magnitud). Hay personas que no voy a olvidar por su compañerismo y calidad profesional, a todos mi genuina vocación de docente dentro y fuera de las aulas. ¡Me llevo los mejores recuerdos!

Edhita Mariana Fernández

DNI 4.848.352 - Roca