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"Chos Malal, cementerio de elefantes"

Haciendo alusión a una vieja metáfora futbolera, de esta manera se refiere la gente de Santa Fe a los equipos grandes que siempre han caído derrotados en la cancha de Colón. En estos momentos, mientras recorro las calles de Chos Malal, se me viene a la imaginación ese refrán al observar cómo cuatro grandes elefantes se encuentran como caídos, derrotados en nuestra ciudad.

Por empezar, hace ya varios años se comenzó la construcción de tres mini-gimnasios en distintos barrios. Ha pasado el tiempo y todavía no se terminan. Y es más: se están deteriorando y son en muchos de los casos blanco de las pedradas de los niños y jóvenes que bien podrían estar disfrutando de "ése", su lugar de encuentro, para realizar actividades.

Pero lo más lamentable de todo es el nuevo "elefante blanco" que se construyó: la tan ansiada pileta de natación cubierta, un magnífico edificio que se observa desde lo alto de la ruta o cuando uno pasa cerca de él.

Pero ¿qué ocurre? A principios de año se realizaron pruebas, se llenó con agua, ya se nombraban empleados, cuidadores, técnicos, etcétera. Sin embargo, hasta el momento sigue allí inerte, como una gran estatua a cuyo lado todo el mundo pasa y sólo se puede observar.

De acuerdo con los comentarios, existen algunas irregularidades en su estructura que no permiten su puesta en funcionamiento, por lo que la comunidad del norte neuquino no puede disfrutar de tan magnífica obra. Yo me pregunto: ¿su construcción no le costó al Estado provincial mucho dinero para que todavía, a seis meses, no pueda ser utilizada? ¿Quién controló la obra? ¿Quiénes son los responsables de que esos detalles no permitan que el natatorio funcione?

En la localidad existe una oficina de Obras Públicas de la provincia; me imagino que allí hay personas que están para controlar las obras que emprende el Estado, para que éstas se lleven a cabo en el tiempo previsto -en lo posible- y en las condiciones adecuadas para que funcionen correctamente, ¿o no?

¿No puso el Estado provincial a alguien que cuidara sus intereses y el de todos los ciudadanos que pagamos los impuestos para que se lleve adelante no sólo esta obra sino muchas otras?

¡Qué se le va a hacer! Parece que la comunidad está acostumbrada a estos "pequeños detalles" para algunos y seguimos padeciendo que el río se lleve una pileta de natación enclavada en el centro del cauce, que se apedreen las ventanas y los techos de los mini-gimnasios, que el hormigón de las calles dure sólo unos pocos años, que no existan angares que se pagaron y que haya un natatorio cubierto con pileta climatizada que costó 4 millones de pesos y que todavía no se puede utilizar.

Oscar A. Orlando, DNI 13.387.229

Chos Malal



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