Somos vecinos de Centenario y queremos expresar nuestra opinión y nuestros sentimientos respecto de la denuncia realizada contra el secretario de Desarrollo Social del municipio, Rubén Valenzuela. Nos vemos en la obligación de utilizar este diario para ello puesto que en varias oportunidades hemos querido utilizar nuestra "supuesta" libertad de expresión en algunos de los medios radiales de nuestra ciudad y no se nos ha permitido hacerlo.

Es de destacar que nuestra intención no es de carácter político, dado que somos en la gran mayoría personas carenciadas, ancianos y madres solteras a quienes el señor Valenzuela ha visitado personalmente y ayudado de acuerdo con las necesidades de cada uno, así como también personas a quienes no ha tenido necesidad de asistir pero que hemos visto cambios favorables en la parte social de nuestro municipio, sector siempre muy abandonado por los gobiernos de turno.

Lamentamos que toda esta acusación sea sólo un manejo político, sucio por cierto, ya que esto significa que algunos integrantes de los partidos políticos oponentes al oficialista -sobre todo aquellos que vieron truncada la posibilidad de continuar con el poder- no quieren a nuestra ciudad ni a la gente que la compone. Por ello, desde nuestra posición de simples vecinos, carenciados o no, simplemente pueblo de diferentes partidos políticos e independientes, les rogamos que les permitan gobernar al actual intendente y trabajar a los funcionarios y dejen de acusar y ensuciar el buen nombre de las personas sin pensar que ellos también son el pueblo, con sus virtudes y defectos. Si realmente les interesa el crecimiento de nuestra localidad, apoyen, acompañen, esfuércense para que continuemos creciendo y no para poner palos en la rueda y que seamos cada vez más pequeños. De ese modo nos demostrarán que su partido realmente quiere al pueblo y se preocupa por él.

Sin desmerecer la situación de Alicia, "supuesta" víctima, nos preguntamos por qué seguir acostumbrando a los pobres a vivir pobremente, dándoles lo que a los que más tienen les sobra. ¿No sería mejor cambiar este pedido de vestimenta, mercadería, materiales de construcción, etcétera, por un trabajo digno para esta chica y un lugar confiable donde pueda dejar a sus niños en sus horas de trabajo?

Desde lo más profundo de nuestros corazones le solicitamos al pueblo que estos medios radiales no nos convenzan con sus invitados políticos porque, mientras ellos pelean puestos, nosotros peleamos con nuestras necesidades. No nos pueden convencer de que juzguemos a una persona, tenga el nombre que tenga -en este caso, Valenzuela-, ya que hay otra parte del pueblo que ha vivido otras situaciones con este señor: apoyo moral, social y espiritual. Hemos compartido mates, tortas fritas y hasta una sopa en nuestras humildes casas con él. Aquellos que realmente necesitábamos de los comedores recibíamos mercadería para cocinar en nuestras casas, lo que por cierto no nos humillaba tanto como tener que asistir a los comedores, y de la misma forma recibíamos medicamentos, pañales, colchones, chapas y hasta en ciertas oportunidades el arreglo de alguna puerta con sus propias manos.

Con estas humildes palabras simplemente queremos expresar lo que nunca antes nos dejaron decir y a su vez que los vecinos sepan que éramos una gran mayoría los que nos sentíamos felices y contenidos por el señor Valenzuela.

Susana Millanao

DNI 30.854.489

(Siguen otras firmas)

Centenario