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Con los pibes también gana

"Cipo" despachó a Arroyo Seco 3-0 y se encamina a la clasificación.

CIPOLLETTI (AC).- Estaba "obligado" a ganar para no desperdiciar la chance de acercarse a la clasificación y cumplió el objetivo con holgura. Con una formación plagada de "canteranos" Cipolletti despachó a Real Arroyo Seco con un contundente 3-0 y la Visera ovacionó al juvenil plantel que dejó al albinegro a un paso de la segunda ronda.

El triunfo tiene varias lecturas positivas: confirmó que hay recambio confiable, estiró a siete la ventaja sobre su más cercano perseguidor, que volvió a ser Brown de Madryn, quedó a nueve de Arroyo Seco y dejó fuera de la pelea a los santafesinos porque el próximo fin de semana tendrán fecha libre.

Claro que no fue un partido sencillo. "Cipo" tuvo que ser paciente para poderle entrar a un equipo que apostó a refugiarse atrás con mucha gente, tratando de meter alguna contra, y que no salió de su esquema ni cuando estaba abajo en el marcador.

Las pocas situaciones de gol se debieron a que Arroyo Seco aprovechó las escasas dimensiones del campo de juego para ensuciar el juego con dos líneas de cuatro metidas bien atrás.

La forma que encontró el albinegro de romper esa estrategia fue con pelotazos para romper el off side. Y precisamente por esa vía llegó la apertura.

Weisser logró desprenderse luego de un largo pase que venía desde la defensa, tocó con Dómini, éste le devolvió la pared y fue a buscar el centro. Fue una verdadera jugada de pizarrón que terminó con la habilitación hacia atrás de "Pikachu" para que "Mojarra" empujara al gol.

Con el 1-0, el local se afirmó mejor gracias a un sólido trabajo defensivo y un mediocampo que robó y tocó criteriosamente, con un Leonardo Larenas un escalón por encima de una media de muy buen nivel. El abroquelamiento de los santafesino continuó y por eso a "Cipo" le costó crear de mitad de cancha hacia adelante.

Lo tuvo Berra pero su remate se fue al lado del palo. Claro que el neuquino tendría la revancha en el segundo tiempo y luego de una jugada calcada a la del primer gol, pero esta vez con Weisser y Cid como generadores del ataque.

El "Máquina" llegó al fondo, mandó el centro atrás y Berra empujó al gol.

El ingreso de Mario Ávila le dio más vértigo al ataque en los minutos finales.

En los últimos 15 la diferencia se pudo haber estirado, pero Carrasco, Weisser, el propio Ávila y Henry Sáez fallaron en el último toque.

En el epílogo el "Goldo" Sáez tuvo su premio a la insistencia y redondeó un 3-0 eludiendo al arquero y dejando a Cipolletti un paso más cerca de la segunda ronda.



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