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"Agua que no has de beber... no la contamines"

No borres con el codo lo que escribes con la mano. Tanto va el cántaro a la fuente, que al final se rompe. El árbol no deja ver el bosque. Quien todo lo quiere, todo lo pierde. Más vale prevenir que curar. No todo lo que reluce es oro... Frases populares que vienen a cuento.

Con suma preocupación, vemos que por acciones o inacciones de nuestros gobernantes estamos corriendo el serio riesgo de que en un futuro no muy lejano los habitantes de Zapala tengamos que resignar uno de nuestros bienes más preciados, acaso el más importante, por incumplimiento de normas que expresamente hemos establecido en nuestra Carta Orgánica Municipal. Todos los convencionales que la reformamos durante el año 2006/07 coincidimos plenamente en resguardar nuestra agua, obligando al municipio a proteger el acuífero de toda contaminación, "... atendiendo a las prioridades de consumo humano presente y futuro". Asimismo declaramos el acuífero Área Natural Protegida, intangible e intransferible (artículos 232, 233 y 234 de la CO). En este tema como en muchos otros, existió total consenso de las fuerzas políticas que representaban en ese momento la voluntad popular, incluido el actual partido gobernante. Se hicieron en la convención encendidas defensas de la preservación del acuífero como un tesoro natural inalienable.

Y digo incumplimiento porque de alguna manera, dejando hacer, se esta permitiendo el avance de empresas petroleras que en función del dios-dinero están anteponiendo intereses económicos a la preservación de un bien tanto o más caro que el petróleo, haciendo primero tareas de exploración y luego de perforación y explotación. Digo esto porque, cuando no haya agua de consumo y tengamos que ir a comprar a las góndolas de los supermercados, si hoy un litro de agua sale aproximadamente lo que un litro de nafta, ¿cuánto más saldrá el agua el día en que no nos quede otro remedio que comprarla para el consumo?

Más del 90% del agua que consume la población mundial es agua subterránea. Cuatro litros de pintura o un litro de aceite para autos penetran en la Tierra y contaminan un millón de litros de agua potable. Las aguas subterráneas suelen ser más difíciles de contaminar que las superficiales pero, cuando esta contaminación se produce, es más difícil de eliminar. Sucede esto porque las aguas del subsuelo tienen un ritmo de renovación muy lento.

Vecinos de Zapala: no hace falta ser ultraecologista ni pertenecer a Greenpeace, pero tampoco hace falta mucha visión para ver que el riesgo existe y esto sin dramatizar. Sobradas muestras hay en el mundo de los desastres ecológicos que provoca el derrame de petróleo en aguas a cielo abierto, que incluso tienen la posibilidad de ser limpiadas o purificadas. Pero cuanto más será el perjuicio en una napa acuífera que tiene la fragilidad de su imposible limpieza en caso de ser contaminada por su subterraneidad.

Ahora bien, si lo único que importa es generar dinero y fuentes laborales, pues que por voluntad popular se enmiende la Carta Orgánica y, con el conocimiento de todos los habitantes de la zona centro, avalemos que se puede explorar y perforar a riesgo de contaminar el acuífero y estemos entonces dispuestos a tomar agua empetrolada como un alto costo para el supuesto bienestar de la comunidad. Tal vez si decidimos cambiar nuestras prioridades y democráticamente lo elegimos, entonces sí luz verde a esta contaminación aceptada, que implicará no sólo el deterioro de la calidad del agua sino la posibilidad de que el acuífero directamente se vaya a otras napas y desaparezca. Con lo cual... ¡el último que se vaya, que apague la luz !

Sepamos distinguir y que no nos vendan gato por liebre. Porque el poder económico que representan estos intereses trabajará en todos los frentes, pegando donde más le duele a la gente que es la falta de trabajo, y seguramente pondrá en jaque a la población y, de tanto insistir, es posible que pisemos el palito y en función de esos intereses entreguemos nuestro don más preciado.

Cuando decidí aceptar la nominación para convencional constituyente, no sólo lo hice para tener la posibilidad de ayudar a enriquecer nuestro ordenamiento legal, el marco en el cual debemos manejarnos los zapalinos, sino también con un fuerte compromiso de hacer cumplir esa normativa en todo momento. Por ello es que en esta oportunidad entiendo una obligación salir a defender estos temas que no debieran estar en discusión.

Espero que todos los ciudadanos que quieren este suelo, los nativos y los adoptivos, se pongan en pie de alerta y, más allá de lo atractiva que pudiera ser la aparición de empresas para hacernos comarca petrolera, no perdamos de vista la importancia que tiene el agua en nuestro diario vivir.

Claudio Balaguer

DNI 14.993.550 - Zapala



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