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El Club Hogar Rural del INTA | ||
En este ir y venir de chacra en chacra, la familia Todero Rodríguez se relacionó con el INTA desde su nacimiento. "Para muchos productores fue muy importante el INTA -afirma el matrimonio Todero-; en ese tiempo se hacía verdadera extensión y la familia productora estaba muy integrada con la institución". En INTA Guerrico estaba de supervisora Jorgelina Ruival, Celina Ciccero era extensionista en Neuquén y Selfa Barrionuevo era la coordinadora regional. "El Club 4 A (adiestramiento, acción, ayuda y amistad) era el grupo de varones y las señoras de los productores formaban el Club Hogar Rural, donde se capacitaban en algunos oficios y hacían actividad sociales. Tomaban clases con los ingenieros y los ingenieros iban a la chacra, donde muchas veces agradecían porque aprendían de los productores. El club nos unía, fortalecía lazos. Fue algo inédito". En Extensión no sólo se enseñaban todas las prácticas culturales de la chacra a las familias productoras, también se explicaba a las mujeres cómo hacer envasados, embutidos, industrializar productos. Además, se enseñaba teatro, oratoria, declamación, puericultura, etc. y hasta había un grupo folclórico. Todero era presidente de la peña folclórica y su esposa estaba a cargo de los discursos en los actos. "'Encarna' -señala su hijo Héctor- se ha caracterizado por ser la 'gallina' de la familia, siempre atrayendo el entorno hacia ella, ya sea con su amor y comprensión o con sus enormes arrollados con mucho chocolate y dulce de leche, los riquísimos strudels de manzana o las sabrosas paellas a la valenciana. Todos la reconocen como una mujer muy linda, valiente y decidida, que hizo y acompañó cada emprendimiento con toda la fuerza necesaria. Haciendo ladrillos, arriba del tractor o en cualquier trabajo de chacra, como participando en cuanta institución tuvo oportunidad y especialmente en el Club Hogar Rural, donde tuvo una destacada actuación". La familia Todero ganó un quinto premio nacional de conservas de frutas y hortalizas organizado por INTA y recuerda con nostalgia aquella experiencia que tanto ayudó al productor valletano. El Club Hogar Rural fue una red increíble, por eso lo aniquilaron en 1974. Algunos consideraron que era peligroso mantener tan unidos a los pequeños productores. "El INTA tenía entonces un desarrollo muy importante, era como una escuela para el productor. Nos dio pena cuando se vino abajo". (SY) |
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