El "Millo" no pudo en jugadas, pero aprovechó al máximo la pelota parada. Abelairas hizo el primero y lo festejó con Sánchez. River tuvo cuatro puntas, pero ganó gracias a Ferrari y al "Pitu" Abelairas.

Tras un primer tiempo opaco, River encontró el camino al arco rival en dos pelotas paradas y venció a Gimnasia (Jujuy) por 2-0. Así, fue el único grande que cantó victoria en la jornada inaugural del Clausura.

Matías Abelairas, de tiro libre, y Paulo Ferrari, con un cabezazo letal, marcaron los goles del conjunto de Diego Simeone, quien tuvo un debut feliz al frente del equipo millonario, que no lució pero aprovechó las circunstancias favorables que se le presentaron frente a un rival que buscó un punto y le fue mal.

Los jujeños llegaron a Núñez con una clara intención de priorizar la defensa por sobre el ataque. Y aguantaron bien en el primer tiempo, con una excesiva cantidad de jugadores en su campo que le impidió al ofensivo River de Simeone generar situaciones claras.

Al "Millo" se le complicó. La visita le cerró bien los espacios y no pudo entrar en ningún momento de esos 45 iniciales. No anduvieron Ortega ni Rosales y sólo el chileno Sánchez, en cuentagotas, dio una pequeña muestra de su calidad.

Por eso el local, pese a tener continuamente la pelota, casi no llegó en esa primera parte. Apenas si lo hizo a los 39 con un remate de Sánchez que contuvo con cierta dificultad Valdiviezo.

Tal fue la impotencia millonaria que Radamel pasó inadvertido. Los jujeños, que prácticamente se limitaron a defender durante todo ese segmento, tuvieron, no obstante, la chance más clara. Fue sobre los 21, cuando Desvaux, muy libre, cabeceó desviado un córner ejecutado por Miramontes. Y no hubo mucho más entre un equipo que intentó destruir y otro que no supo construir.

En el inicio de la parte complementaria Gimnasia estuvo cerca del milagro cuando un nuevo cabezazo de Desvaux picó y pegó en el travesaño.

Pero un minuto más tarde el Sánchez fingió una infracción en el borde del área, Pompei "compró" y, desde inmejorable posición, Abelairas abrió el marcador con un tiro elevado que sorprendió a un adelantado Valdiviezo.

A partir de ese momento el "Lobo" tuvo que salir a buscar el empate y el local encontró los espacios que no había tenido en el primer tiempo.

Y a los pocos minutos aumentó cuando Ferrari cabeceó libre en el medio del área un córner que llegó desde el sector izquierdo. Después River reguló y pensó en el partido del miércoles por la Copa.

Y Gimnasia intentó el descuento, pero le faltaron ideas. Esas ideas que el equipo de Ramacciotti necesitará de aquí en adelante para salir de una posición complicada.