BUENOS AIRES.- Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) emitió un comunicado advirtiendo a los productores acerca de las implicancias del cierre del mercado europeo para las carnes brasileñas, primer exportador mundial.

La medida de la Unión Europea disparó el precio de la cuota Hilton en el Primer Mundo, por lo que desde la entidad se alentó a los productores de novillos de exportación a "restringir las ventas de hacienda, hasta que el precio de los animales en pie con trazabilidad se condiga con los nuevos valores a los que venderán los exportadores locales".

Ricardo Bruyaile, dirigente del sector, aclaró en distintos medios los términos del comunicado y comparó el actual escenario de la ganadería con la situación triguera, cuando la entidad que preside Mario Llambías lo calificó como "una cacería dentro del zoológico" que favorecería a la exportación.

-¿Hay que retener la novillada?

-En realidad lo que no queremos que nos pase ahora al sector agropecuario es lo mismo que pasó con el trigo. Porque con la excusa de mantener los precios en raya, los exportadores (que en el caso de la ganadería

serían los frigoríficos), entiéndase molinos y cerealeras, se quedan con la diferencia del aumento de los precios internacionales. Lo que pretendemos es que el productor sepa que, como consecuencia del cierre del mercado europeo a la carne brasileña, es lógico esperar subas en el precio internacional de la carne. La tonelada de cortes Hilton ya había llegado a los 17.000 dólares y esperamos que eso se traduzca en un mejor precio para el productor.

Si bien, Bruyaile indicó que el aumento de la carne en Europa ronda el 40%, aclaró que no se pretende que el precio del novillo aumente en la misma magnitud. "Nosotros no estamos diciendo cuánto tiene que aumentar o no el precio del novillo", pero el dirigente consideró que el precio razonable para el productor sería el que reciben en Uruguay, en torno a 1,40 dólar el kilo vivo, o sea 4,41 pesos a un cambio de 3,15 pesos por dólar. Esto es 1,22 pesos más que el precio de referencia que ayer informaba la ONCCA para el valor promedio del novillo de exportación.

"En realidad creo que el gran problema que tenemos en la Argentina con la carne, entre una larga lista, es que hay muchos frigoríficos que hacen consumo y que por lo tanto no van a poder competir con los precios bajos de los (cortes) delanteros que van a tener estos novillos de exportación. Entonces tratan de boicotear esta salida a los mercados internacionales porque quedan descolocados con los delanteros o con las costillas", confió el dirigente rural.