La pintura es la forma más rápida y de menor costo por metro cuadrado para renovar o mejorar distintos tipos de pisos. Hay que aplicar el material especialmente diseñado para cada uso. Aconsejan preparar bien la superficie antes de pintar. Qué es el tratamiento ácido.

Si se desea revivir pisos gastados o descoloridos se pueden utilizar pinturas especiales, formuladas a base de resinas y parafinas, que le otorgan al suelo una película de muy buena resistencia al agua y al tránsito. Son impermeables y antideslizantes, y vienen listas para usar aplicándose con pincel, rodillo o soplete, en dos o tres manos sobre la superficie limpia y seca.

Claro que dependiendo del tipo de piso a tratar, es imprescindible hacer previamente la elección acertada del producto a utilizar, ya que en el mercado hay una gran variedad de pinturas y recubrimientos para pisos que habrá que evaluar según el uso y el destino del local.

Como corresponde, para una buena pintura hace falta previamente una correcta preparación de la superficie en cuanto a limpieza, desengrasado y eliminación de partes flojas, de acuerdo al estado de cada solado.

Los especialistas aconsejan en un primer paso utilizar removedores, solventes o desengrasantes según el caso, para asegurar una buena adherencia de la pintura al aplicarla.

Si el piso fue pintado alguna vez, es necesario eliminar con espátula todo resto de pintura floja durante este lavado previo. Sin este paso, afirman que es imposible garantizar buenos resultados, aunque se utilicen productos de alta calidad.

Como el piso es una superficie de mucha presencia en la decoración, es importante ser cuidadosos a la hora de elegir el color que se vaya a utilizar, principalmente porque este tipo de pinturas viene en una acotada variedad de colores

Desde un simple patinado hasta una imitación de otro material, la pintura artística es otra de las opciones, ya que produce un efecto interesante dentro de la decoración. Para realizar esta técnica se utilizan otro tipo de pinturas que las específicas para pisos, para lograr mayor variedad de colores.

Para una buena terminación es importante cubrir el trabajo con una mano de sellador poliuretano o barniz al agua (los barnices al aceite forman una capa amarillenta que apaga los colores del dibujo y le dan una apariencia envejecida).