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Silvina Signes: “Las agujas de las bardas”
Cada vez mÁs empresas Y PARTICULARES se suman
a la tendencia de colocar obras de arte en espacios de su
pertenencia pero que, a la vez, son de ACCESO pÚblico.
En las Últimas semanas, dos obras financiadas por privados PASARON
A ENGROSAR la gran oferta de esculturas de los paseos roquenses.

 

En el frente del edificio Las Bardas de Roca, el consorcio decidió reemplazar un árbol que no resistió los embates climáticos patagónicos por una obra de la artista local Silvina Signes, vecina del edificio. “Éste es un proyecto que yo tenía maquetado desde el ’96 ó ’97. He trabajado durante muchos años con el tema de las agujas, las esferas, los recorridos de la línea en el espacio y me pareció que iba con el edificio, hice otros proyectos más recientes que me parecía que no se adecuaban tanto. Los artistas vamos acumulando cosas y ésta fue una buena oportunidad para concretarla”, explica la artista.
“Quiero recalcar que, en general, este tipo de obras las puede hacer un artista a través de una inversión pública y que, como en este caso, lo haga un consorcio privado es también una inversión para la ciudad porque, si bien está dentro del límite urbano del edificio, es una obra de dominio publico. Me parece importante que desde lo privado se invierta en una obra de esta envergadura”.
Foto de obra: Alberto Riccheri

“Madre Tierra”, de Rafael Roca

A pedido de la Minera Cholino, el escultor Rafael Roca realizó la obra “Madre Tierra” que desde hace unas dos semanas se agregó a la oferta artística de la ciudad.
El escultor explicó a que desde el primer momento supo que debía ser una Pachamama, por la relación que tenía la minería con la tierra. Pero como la Pachamama no tiene referencias, buscó su inspiración en diosas de la fertilidad. “Es una mujer embarazada, acostada, pero que integra también toda la morfología de la naturaleza del Sur. Por eso, en las oquedades, se ven animales que tiene que ver con la profundidad de la tierra y con los frutos y las hojas de esta zona”, dijo recientemente.
El trabajo fue solventado íntegramente por la minera; el escultor trabajó junto a dos estudiantes del INSA, Fernando Spagnuolo y Gustavo Cabrera, con herramientas especiales para esta piedra.
Foto de obra: Andrés Maripe



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