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Flores y verduras, juntas

Dos novedades editoriales llevan el sello de “Albatros. Jardinería práctica”, ideal para los amantes de las plantas y las flores.
Uno de los libros se titula “Huerta-jardín orgánica. Una guía esencial para el diseño y el cultivo de una huerta ornamental con técnicas ecológicas”, de María Gabriela Escrivá.
La autora sostiene que “existen muchos motivos para cultivar nuestras propias hortalizas: por su sabor, su frescura, su calidad biológica o simplemente por el placer de contemplarlas desde la siembra hasta que terminan en nuestro plato”. Por ello, agrega, “históricamente las huertas de producción han estado confinadas a sectores apartados de la casa y alejadas de la vista. Una huerta jardín, por el contrario, busca protagonismo en el diseño. La asociación de hortalizas y florales ornamentales logra, a primera vista, el efecto estético de un jardín”.
Escriba acota que “al cultivar de forma conjunta flores y hortalizas específicas se beneficiará todo el cultivo en su conjunto, ya que algunas plantas con exclusivo valor ornamental proveerán de alimento y protegerán a los predadores encargados del control biológico, repelerán plagas o proveerán una estructura de sostén que facilitará el desarrollo de las verdura”.
Verán, es más que atractiva la propuesta de esta técnica en floricultura y jardinería egresada de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires.
Su planteo, a lo largo del libro, se divide en cuatro partes:
• productividad y estética en un solo espacio,
• hortalizas ornamentales y flores comestibles,
• manejo orgánico de plagas y enfermedades y
• una atractiva galería de fotos para entusiasmarse aún más.
“Albatros” propone, con este libro, alcanzar “una huerta jardín para el goce de los sentidos: el sabor y el olor de las flores y el valor estético de las hortalizas se combinan con un criterio orgánico y saludable”.
La otra novedad editorial se titula “100 Flores argentinas”, de Eduardo Haene.
Es un catálogo ilustrado de las flores más notables del país que presenta cien géneros que reúne más de dos mil especies nativas.
Dispuestos por orden alfabético y con el estilo habitual de los manuales de jardinería, es una obra de fácil consulta y gran practicidad.
La idea es favorecer la valoración y el disfrute de la flora nativa de Argentina poniendo en juego todos los sentidos.
“El libro está pensado para que resulte de utilidad tanto a los amantes de las plantas que buscan especies para cultivar como a los naturalistas, los guías de turismo, los fotógrafos y los viajeros, para que puedan identificar, en sus salidas, los representantes más llamativos de la flora nacional. Confiamos que el trabajo también será de interés para los docentes que deseen enriquecer sus prácticas escolares”, apuntaron desde la editorial Albatros.
Haene es naturalista e ingeniero agrónomo. Es coautor de “100 árboles argentinos”.

 



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