Hervir las papas con cáscara. Escurrirlas, pelarlas y reducirlas a puré. Dejar enfriar. Agregar la manteca muy fría, pasada por el rallador de verduras, y la harina cernida con el polvo para hornear. Salpimentar y añadir las nueces o maníes picados y el queso. Ligar con un huevo y unir rápidamente en una masa homogénea.
Volcarla sobre la mesada, aplanarla presionando suavemente con las palmas de las  manos y doblarlas en tres. Colocarla dentro de una bolsita de polietileno y llevar a la heladera  de 2 a 3 horas.
Estirar la masa dejándola de 1 cm de espesor. Grabar la superficie con un tenedor grande de dientes gruesos y separados. Untar con el huevo restante, batido. Si se desea, espolvorear con semillas de amapola, kümel o sésamo.
Cortar barritas de 2 por 5 cm. levantarlas con espátula en una placa enmantecada y enharinada. cocinar en horno precalentado, a temperatura moderada, alrededor de 15 minutos.
Servir las barritas tibias. Son ideales para acompañar sopa crema de apio, de tomates o de espárragos. Como variante, estirar la masa de un espesor algo mayor y cortar rombos, que pueden integrar una panera surtida o una mesa de quesos.