¿Cuál es el objetivo del proyecto de ley?
-Hay un concepto general de la legislación en materia contractual que siempre trata de suplir las desigualdades que existen entre los contratantes. El tema de la comercialización en la fruticultura es un caso de ellos. Lo que se intenta es proteger a la parte más débil en la contratación para lograr una verdadera igualdad y justicia en la contratación. Éste es el propósito general de la ley, donde indudablemente el productor se encuentra en una situación de desigualdad frente al adquirente de la fruta por poderío económico por un lado y, por otro, por el propio carácter de la fruta, que es perecedera, lo que condiciona su intercambio.
-¿Cuáles son los ejes principales de la iniciativa?
-El proyecto tiene cuatro ejes. El primero es fijar los requisitos que debe reunir el contrato de comercialización de frutas pomáceas, la reglamentación de las condiciones generales y algunas específicas como establecer la variedad de fruta y el porcentaje de descarte, entre otras. Segundo, se crea un registro de los adquirientes de pomáceas, para que el productor sepa a quién le va a vender y si está inscripto... claro que se establecen algunas sanciones cuando no se cumple este punto. El tercer eje se refiere a que cuando se vende la fruta el adquiriente no tiene un dominio perfecto de la propiedad de la fruta sino una propiedad fiduciaria; se crea un fideicomiso donde se establece una propiedad acotada y limitada para proteger el crédito del productor. Por último, se crea la posibilidad de discusión en comisiones entre organizaciones de productores y fruteros para determinar el precio de la fruta.
-¿Cómo funcionaría?
-Funcionaría como una especie de paritaria para fijar el precio de la fruta. Muchos de estos puntos están presentes en la legislación rionegrina, pero me parece que es muy importante sacar una ley nacional porque en realidad la mayoría de estos temas son propios de la legislación nacional y no provincial, según la Constitución nacional. Una legislación sólo provincial no tendría el amparo constitucional suficiente como para tener fuerza ejecutiva para proteger realmente al productor.
-¿Cómo surgió el proyecto y quiénes participaron del mismo?
-Esta propuesta me fue acercada por parte de la Federación de Productores de Río Negro y Neuquén y en base a ese proyecto presenté junto con el diputado Cejas el proyecto en la Cámara de Diputados. Nosotros tomamos el proyecto tal cual nos lo acercó la Federación y le hicimos pequeñas modificaciones formales como profesionales abogados.
-La ley plantea establecer en diciembre el precio de la fruta que terminará definiéndose en marzo o abril. ¿Habrá consentimiento al respecto? ¿Quién proveerá garantías respecto de los precios pactados ex-ante?
-No. En realidad la ley habla de un precio determinado o determinable, con pautas claramente fijadas a partir de las cuales se pueda fijar el precio. En primer lugar la ley habla de una paritaria donde se establecería un precio base y en segundo lugar se habla de un precio determinado o determinable que es el establecimiento de las pautas a partir de las cuales se definirá el precio.
-Una de las críticas del sector empresario es que no se lo invitó a formar parte y a discutirla...
-Está previsto en comisión invitar a todos los sectores involucrados y ellos también van a ser invitados. También se está analizando la posibilidad de invitar a todo aquel que quiera opinar y participar de la comisión. Es más, se analiza la alternativa de realizar una audiencia pública aquí, en el Alto Valle, aunque esto depende de si se involucra o no en la ley al resto de las economías regionales del país.
-¿Cuándo estima que será tratado el proyecto de ley en las distintas cámaras del Congreso?
-La idea es que la Cámara de Diputados lo pueda tratar antes de fines del 2011 y que el Senado lo trate el año que viene.
El Conflicto actual
-En el conflicto actual intervienen los empresarios reclamando por una reducción impositiva, los productores por subsidios y el gremio por aumentos de sueldo. ¿Qué prioridades establece ante los tres reclamos?
-Yo creo que este problema de la actividad frutícola en general se debe, entre otras causas, a la falta de competitividad de nuestro tipo de cambio como hemos tenido hasta hace poco. Esto obliga a que se busque mayor eficacia y un mayor acuerdo para repartir equitativamente las ganancias. Lo que se habla es que la actividad requerirá un aporte de Nación que ronda entre 100 y 150 millones de dólares más. Se ha pedido la decisión política al respecto y ha habido gestiones del senador Pichetto, de los intendentes y del gobernador Saiz, pero se está esperando que se tome la decisión. El gran tema es cómo implementar algún esquema de modo que si se da algún tipo de mejora, reintegro o disminución de las retenciones llegue al productor.
-¿Se priorizaría al productor?
-En realidad en algunos sectores del gobierno se está tratando la idea de morigerar los reclamos salariales; la idea es poner algún tipo de tope a los reclamos salariales en esta etapa. Sin embargo creo que el sector laboral está muy fortalecido como para alcanzar su reclamo, a pesar de que existan algunos pedidos de morigerar este pedido de aumento.
-¿Cuál es el rol del Estado provincial?
-El Estado provincial ha tenido a través de la gestión Saiz un rol totalmente pasivo. Ha acompañado sólo algún tipo puntual de reclamo de los productores y de los trabajadores. Creo que es muy poco lo que ha hecho el gobierno provincial para tratar de tener una política provincial frutícola que tienda a crear una nueva estructura productiva que trate en el mediano plazo de solucionar estos problemas que tenemos todos los años.
-¿Y cuáles serían las alternativas?
-En primer lugar, articular los sectores es una tarea del gobierno provincial que debería haberlo hecho y, una vez articulados los sectores, encabezar los reclamos en Buenos Aires que resulten de esa articulación. El gobierno debería haber articulado, tendría que haber tenido una idea clara para el sector respecto de qué hacer, y no la tiene.
-Como diputado nacional, ante el conflicto actual, ¿qué hace usted?
-Yo he tenido reuniones con intendentes inquietos por el tema. Y estoy en contacto permanente con el senador Pichetto, que es el que está a cargo del tema.
-¿Por qué cree que todavía los sectores no han logrado un acuerdo entre ellos?
-El problema es muy complicado, pero de todas maneras el sector productor tiene dificultades muy grandes para organizarse gremialmente y sostener en el tiempo medidas en común. Éste creo que es uno de los problemas fundamentales por los que no logra objetivos comunes. Ante la falta de peso propio prevalece la postura de los otros sectores. Éste sería el principal problema que distingo.
(Redacción Central)