Los números dados a conocer días atrás por el USDA confirman la percepción que existía en el Valle: hay mucha más fruta para cosechar que el año anterior.
Pero, a diferencia de otras temporadas, todo estaría indicando -por una cuestión netamente coyuntural de la región- que una parte importante de los excedentes esperados para la próxima temporada no se destinaría al consumo en fresco.
Las empresas exportadoras embalarán algo más pero con fruta de calidad, el dato diferencial respecto de la temporada que ya está por terminar. De ahí que podría quedar mucha fruta disponible para la industria de concentrados, lo que en definitiva pondría un techo a los valores a percibir por el productor por su fruta de descarte.
Habría que esperar un escenario opuesto al que se observó esta temporada en la relación de la oferta y la demanda de la fruta para la industria. Todas especulaciones para una temporada que todavía no se inició.