Las exportaciones regionales de jugos concentrados alcanzaron en los primeros ocho meses del año las 24.100 toneladas.
La cifra refleja una caída del 38% respecto de los niveles de venta del mismo período del año anterior y es la menor de las últimas dos décadas.
Así lo detalla un reciente informe elaborado por la terminal portuaria Patagonia Norte en el que se destaca que Estados Unidos continúa absorbiendo cerca del 100% de la oferta exportable de los productos de este tipo que egresan por el puerto de San Antonio.
Respecto de este último punto hay que señalar que las colocaciones de concentrado que se embarcan por el puerto rionegrino representan -según el promedio de los últimos cinco años- más del 95% de las ventas.
El desplome observado en los volúmenes exportados complica sin dudas a la industria regional.
La escala con la que está trabajando la mayor parte de las empresas genera un importante aumento de costos internos que resta competitividad al sistema.
"Muy poca fruta fue la que se procesó esta temporada por la industria producto de mermas en la cosecha y de que muchos chacareros apostaron a guardar en frío en mayor proporción que en años anteriores. Esto afectó a todo el sistema ya que sin una escala adecuada los costos fijos para nuestro sector se multiplican", admitió un importante operador regional al ser consultado por el tema.
Sin embargo, en esta última parte del año algo más de fruta ingresó a molienda por la baja de precios registrada en el mercado en fresco. "Las expectativas positivas del mercado interno se cayeron y algunos productores están intentando vender parte de su fruta a la industria", aseguró la fuente.
En cuanto a los precios, estadísticas privadas dan cuenta de que las cotizaciones se mantienen estables, aunque recuperaron ciertas posiciones respecto del cierre de julio.
Algunos operadores aseguran que este reacomodamiento de precios se debe a las bajas proyectadas para esta temporada sobre las cosechas del hemisferio norte y China, dos grandes productores de concentrados en el mercado.
En la región, sin embargo, sigue reinando el escepticismo. "Muchas empresas están en una situación de quebranto y hay que ver cómo llegan para encarar el año que viene. Algunas ni siquiera podrán terminar esta temporada. La mayor parte de nosotros hemos trabajado a pérdida por los compromisos de venta que tenemos y a la espera de una mejora de precios. Pero esto último no se dio. Tenemos un final abierto", manifestó con preocupación el empresario consultado. (Redacción Central)