Las ventas de vinos en el mercado doméstico continúan su tendencia a la baja y en el primer cuatrimestre del año acumularon un descenso del 5,2% respecto de igual período de la temporada anterior.
El último informe proporcionado por el Instituto Nacional de Vitivinicultura da cuenta de que entre enero y abril del 2010 se despachó al mercado interno un total de 2,8 millones de hectolitros, mientras que el año pasado el volumen entregado había sido de 3 millones de hectolitros. De esta manera se afirma una tendencia declinante en el consumo de vinos, debido principalmente a la competencia con otras bebidas, entre ellas la cerveza.
En la primera parte del año, tanto los vinos varietales como aquellos sin mención de la variedad con la cual fueron elaborados experimentaron caídas en su comercialización en el mercado interno argentino.
Los vinos varietales, de los cuales se despacharon 456.921 hectolitros este año, sufrieron una baja del 14,6% respecto del acumulado 2009. La diferencia en volumen entre ambas temporadas fue superior a los 78.000 hectolitros.
Los vinos sin mención varietal, de los cuales se comercializa el mayor volumen en el mercado, acusaron una caída menor, de apenas el 3,6%. Sin embargo los despachos bajaron en 88.198 hectolitros.
En esta franja de productos las bodegas entregaron al mercado interno 2,3 millones de hectolitros en el cuatrimestre.
Un rubro que se está afirmando dentro del gusto de los consumidores argentinos es el de los vinos espumantes, ideales para las celebraciones. En esta franja de productos la comercialización alcanzó los 63.076 hectolitros en el cuatrimestre, con un alza del 17,4% respecto del año anterior. Un dato llamativo en la venta de espumantes al mercado local fue que, si se compara solamente abril de este año con igual mes del 2009, el crecimiento de las ventas mostró un explosivo avance del 116%, al pasar de los 9.777 hectolitros en la temporada anterior a 21.149 en la actual.
Por el lado de las exportaciones, las estadísticas del INV muestran que hasta abril de este año se colocó un total de 830.470 hectolitros en los distintos mercados, con una baja del 9,1% tomando todos los productos comercializados. Sin embargo, los vinos varietales y los espumantes mostraron un comportamiento diferenciado del resto ya que aumentaron sus ventas en un 6 y un 14% respectivamente en comparación con su desempeño de la temporada anterior. La venta de vinos sin mención varietal bajó un 34% en la comparación interanual.