Esta semana se anunció la liberación parcial de las exportaciones de trigo. Hubo alivio entre los productores y algunos hasta agradecieron al gobierno por el gesto. Esto es como que alguien nos deba 100 pesos desde hace años, termine pagando 10 y acto seguido le agradezcamos por su conducta. La política oficial intervencionista está generando serios problemas. China no recibe nuestro aceite de soja y amenaza con profundizar restricciones. Brasil está en la misma línea. Pero la intervención es "selectiva": el gobierno abrió esta semana la exportación de barrabravas al mundial de Sudáfrica. Sin palabras.
