ucha preocupación. Así resumen en la Federación Nacional de Productores de Fruta de Chile (Fedefruta) el escenario que enfrenta el sector a raíz del creciente temor porque la crisis económica de Grecia se expanda por Europa y afecte las exportaciones frutícolas.
Esto porque el Viejo Continente absorbe el 33% de lo exportado por el sector trasandino, concentrado principalmente en tres productos que se encuentran en plena fase de plena comercialización como las manzanas, peras y kiwis.
De acuerdo a los comentarios realizados por el presidente de la organización, José Antonio Walker, el debilitamiento del euro ha afectado a los exportadores, lo que hace que estos "salgan de Europa y se vayan a EE. UU. con un volumen importante. Por lo tanto, provocamos una sobreoferta en ese mercado y una baja de precios importante", asegura Walker al ser consultado por el tema.
El dirigente agrega que principalmente las peras, manzanas y kiwis se verán "fuertemente afectados", pues la venta de éstos a Europa concluye en septiembre, tras lo cual asegura "nos encontraremos con un euro débil".
De acuerdo a lo señalado por Walker, ya se están percibiendo los efectos de la baja de la divisa, lo que se traduce en un "10% de menores precios".
Para hacer frente a esta situación, el dirigente puntualiza que se debe asegurar "la calidad de nuestra fruta" y, en segundo lugar, abrir los mercados de Asia y el norte de África ya que, asegura, "la fruticultura no puede depender tanto de Europa".
La visión del Gobierno
De acuerdo al subdirector internacional de ProChile, Carlos Honorato, el gobierno trasandino se encuentran revisando las cifras y en "permanente contacto con nuestros equipos" para informar lo que les sucede a las pymes.
En ese sentido, asegura "que les estamos dando luces amarillas y diciendo que esperen un poquito, que no adelanten producción ni preparen grandes cantidades por lo que pueda suceder". Honorato también confiesa que la caída del euro es un tema "que nos está afectando"
Para el presidente de Asexma, Eduardo Moyano, existe "bastante preocupación" por lo que sucede en Europa pero confiesa que hasta el momento "no nos hemos visto afectados con la crisis del Viejo Continente pues las cifras siempre tienen un rezago".
La misma preocupación que se vive en la zona europea comparte el presidente de Asimet, Ernesto Escobar, quien asegura que para contener posibles efectos se hace necesario "mantener una línea de información abierta con estos mercados y los clientes y, por su puesto, seguir enviando calidad para que los precios en destino se mantengan".
(Fuente: Diario Financiero)