Tradicionalmente, hacia el puerto de Buenos Aires se derivaba el 10% de las exportaciones de frutas regionales. Históricamente salían las peras y uvas "primicias" que iban en busca de un mercado de ultramar parcialmente desabastecido. De ahí que las estadísticas mostraran que en los primeros meses de la temporada (hasta la segunda o tercera semana de febrero) la participación de este puerto crecía pero con el paso de los meses el porcentaje fuera dando lugar al fuerte movimiento que registraba San Antonio Este.

Al finalizar la temporada, los datos oficiales daban cuenta de que las salidas por Buenos Aires concentraban entre el 10 y el 15% del total de las colocaciones hacia los mercados de ultramar.

Pero pareciera que este año la participación porteña se ubicará en un piso mayor que el de las últimas temporadas. Según datos consignados por el sector privado, las exportaciones de peras que partieron por Buenos Aires alcanzaron en los dos primeros meses del año algo más de 35.000 toneladas, lo que muestra una participación del orden del 34% respecto del total de los embarques regionales de peras hacia los mercados de ultramar.

Teniendo en cuenta la estadística del primer bimestre del 2009, en esta temporada se puede apreciar un crecimiento superior al 50% en la participación del puerto de Buenos Aires.

Definiciones

Toda la fruta que sale por Buenos Aires lo hace a través de contenedores refrigerados. Este puerto es muy eficiente y está especializado en este tipo de transporte. Asimismo, existe una oferta de embarcaciones que permite una dinámica totalmente distinta de la que ofrecen otros puertos. "Siempre hay lugar al momento de la llegada de un contenedor, y eso es muy importante para los exportadores frutícolas regionales ya que significa un ahorro de tiempo y dinero", confió un empresario.

Todo es una cuestión de costos

El desplazamiento que se observa en las salidas de nuestra oferta exportable hacia los mercados de ultramar corresponde pura y exclusivamente a una cuestión de costos.

La caída de las exportaciones argentinas en los últimos meses (30% interanual) determinó un desequilibrio en el mercado del transporte marítimo: hay más oferta que demanda para este tipo de servicio. Y esto es sinónimo de baja de precios y oferta "spot" inferior a las cotizaciones del resto de los puertos.

Cuando el mercado se encuentra estabilizado, con una demanda y una oferta en equilibrio, el puerto de San Antonio es competitivo respecto del de Buenos Aires. Si bien el costo operativo es superior en el puerto rionegrino, este desfase se compensa con los mayores gastos de transporte, seguros y comisiones que demanda Buenos Aires. Pero cuando se desploman los precios aparecen las ofertas, y esto complica a San Antonio.

(Redacción Central).