Después de los últimos cambios en el gabinete nacional, trascendió esta semana que otro que dejaría el gobierno en los próximos días sería el secretario de Agricultura y Ganadería (SAGPyA) Carlos Cheppi, a quien reemplazaría su segunda, Carla Campos Bilbao. La actuación de Cheppi fue calificada de "decepcionante" para el campo. Como sus últimos antecesores, se dedicó a planificar grandes proyectos con pocos resultados. Perdió la ONCCA a manos de Echegaray y utilizó una de las herramientas que más le gustan a la administración Kirchner: prometer millones para luego trabarlos con restricciones netamente burocráticas. Un dato positivo: con la llegada de Campos Bilbao se espera el anuncio de una baja en las retenciones del maíz y trigo, pero no de la soja.
En esta línea, se supo también esta semana que "no hay un peso en el fondo para el Plan Frutícola Integral", según lo señaló la fuente de Agricultura que mencionó como un hecho la salida de Cheppi. La polémica se desató luego del intercambio de palabras que existió entre el senador Miguel Pichetto y el secretario de Fruticultura Carlos Colavita por el destino que tienen estos fondos. "Todo está muy bien presentado, pero de ahí a que se liberen subsidios o préstamos para los productores falta un largo tramo", aseguró la fuente. Desde la Federación de Productores señalaron que la nueva conducción (Mendoza) que saldrá de las próximas elecciones se abocará a gestionar estos fondos.