La pasada fue una semana "movidita" para el Valle. GF Group, dueñas de las firmas regionales Moño Azul y Salvador Liguori, con su agresiva política de incorporar personal de otras empresas para reorganizar su conducción comercial, dio un paso trascendental: llevó como gerente general del grupo a Roberto "Beto" Gregori, número dos de la firma Expofrut. Según trascendió, las primeras reuniones entre Orsero -titular de GF Group- y Gregori fueron el año pasado, aunque este último habría desestimado la oferta del grupo italiano en aquel entonces. Pero "ahora las cosas son distintas", señaló una fuente que estuvo en las últimas reuniones realizadas hace sólo un par de semanas, donde se habló de esta flamante incorporación. Gregori quedará al mando operativo de todas las empresas de la región, siendo presidente de las firmas un ejecutivo italiano -mano derecha de Orsero- que a partir de julio volverá a residir en Italia. Ayer por la mañana GF Group sacó al mercado europeo un comunicado oficial señalando la nueva incorporación de Gregori al staff permanente de sus empresas. Sin lugar a dudas, éste fue el pase empresarial del año y deja un hueco muy grande en la estructura comercial de Expofrut. Se habla a partir de ahora de un reacomodamiento de ejecutivos en las distintas empresas del Valle por la irrupción de Orsero en un segmento del mercado laboral "sensible" para las firmas de la región. La ola de pases no llegó a su fin. Una fuente allegada a Gregori aseguró que "se fue muy bien de Expofrut y ahora tienen un nuevo desafío por delante: llevar a GF Group a lo más alto en la región".
Mediados de marzo. En un hermoso día de otoño, con sol a pleno y sin el duro viento patagónico chocando sobre su humanidad, Osvaldo "Pirincho" Grisanti intentaba hacer un birdie a 80 yardas del par cuatro. Midió con su aguda vista la distancia al hoyo, y disparó: "Me llamaron de Salentein para dar una mano en organizar toda la parte de las bodegas". Su compañero de juego, sin perder concentración y sin ni siquiera mirarlo a los ojos, lo increpó: "¿Y vos qué tenés que ver con las bodegas". Pasó el tiempo y Osvaldo Grisanti tomó la dirección para reorganizar las tres bodegas hoy en manos del empresario holandés Minjder Pons: Salentein, El Portillo y Callia. Días atrás, presentó el proyecto para adecuar costos y hacer más eficiente todo su esquema de gestión, y ahora es el directorio de Salentein el que lo está evaluando. Pareciera que todos los ex Moño vuelven a la actividad de la mano del Grupo Salentein. Carlos Enríquez, ex gerente de producción de Moño Azul, es hoy CEO de Salentein Fruit; Luis García, ex director de la firma reginense, dirige hoy las oficinas de finanzas del grupo holandés en Buenos Aires; y ahora "Pirincho", ex presidente de Moño Azul, es contratado para liderar los cambios en las bodegas en manos de Pons. "Sólo falta la incorporación de ´Pichi´ y hacemos póquer de Moño", ironizó uno de los empresarios al ser consultado por el tema. Hasta ahí, lo oficial. Los comentarios de la llegada de "Pirincho" fueron más allá del contacto que tiene para modificar el sector bodeguero. Fuentes allegadas al ejecutivo aseguran que "llegó para quedarse algo más de lo acordado en la firma de este contrato". A partir de esta frase, todo tipo de rumores comenzó a correr por el Valle. Algunos poco creíbles, otros malintencionados. Por ahora, éstos son sólo rumores.