Sebastián asumió hace unos meses la presidencia de la Cámara de Productores de Allen, es el presidente más joven de estos entes del Alto Valle. En Allen sucedió a Marcelino Fernández, quien estuvo como presidente de esa institución durante 14 años.
Nunca había participado de las reuniones de productores, pero sintió que debía transitar por ese espacio para saber si desde allí era posible transformar la realidad de los chacareros.
"Hace tres años comencé a participar, debatía, no era de la comisión directiva, pero me gustaba estar, pensar de qué manera podía colaborar para mejorar la situación de los medianos y pequeños productores. Bueno, en un momento, cuando se tenían que renovar las autoridades, me empezaron a pedir que fuese presidente. Yo dudé, no me sentía capacitado, me sentía joven para el cargo. Pero me apoyaron y acá estoy".
"La Cámara tiene el objetivo de defender al productor. No es fácil, la gente está un poco cansada, no todos participan y todo es cuesta arriba. Los productores no estamos unidos, no nos tenemos confianza, hay mucho individualismo. Estoy seguro de que si nos cuidáramos las espaldas entre todos, esta situación que vivimos hoy no pasaría. Pero porque creo que hay cosas que se pueden cambiar y decidí asumir el desafío".
Cuenta que llegó con ganas, pese a las dificultades que intuyó tendría que atravesar. "Veníamos de una temporada buena y no vimos que se venía la noche, el paro de enero fue un golpe muy duro. Y el mundo de la producción es como un puente, si vos le sacás un poste, se cae todo el puente, se cayó la Williams y ahora empezamos a tambalear con el resto de las variedades. Va a haber descarte de todos colores, de todas las variedades", opina.
El lunes 2 de febrero, junto con algunas cámaras de productores y algunos intendentes, Sebastián participó de la convocatoria del jefe comunal de Allen, Graciano Bracalente, para solicitar se flexibilicen algunas normas del Senasa para permitir el empaque artesanal y la salida al mercado interno de pequeños productores. El intendente de Allen hacía 15 días que hacía gestiones en tal sentido. El 11 de febrero la flexibilización fue aprobada, medida celebrada por la Cámara que preside Hernández, aun cuando comprenden la difícil implementación de cambios en breve.
"Por supuesto estoy de acuerdo con que abran las barreras para que los pequeños y medianos podamos vender la fruta esta temporada. Aunque hay dificultades que no son sencillas de resolver. El pequeño y mediano productor está mal, yo vendí mi fruta, pero sé que hay muchos productores que no tienen ni para comprar 500 jaulas para poner la fruta y así poder sacarla de la chacra; tampoco tienen resto para embalar, ni bins para sacarla a granel.
"He visto productores que quisieron llevar fruta a Neuquén, hace años que no podemos pasar la -al mercado concentrador o a las verdulerías-. ¿Eso se va a cambiar?, ¿podremos sacar la producción a otras provincias rápidamente?", se pregunta.
"Acá tenemos muy buena fruta. Tenemos que hacer algo. Yo soy partidario de industrializar. Hacer orejones, envasados, cubeteados. Queremos salir de los empaques. Fijate que estos productos industrializados se están vendiendo muy bien afuera, tendríamos que intentarlo".
"Graciano Bracalente se puso al frente de los chacareros, habló con Senasa y con Fruticultura, pero hubiese sido bueno contar con el apoyo de todos los intendentes del Alto Valle, porque juntos seríamos un bloque muy fuerte. La declaración jurada, la idea salió del intendente de Allen, luego se sumaron las cámaras de Cipolletti y Fernández Oro; acá empezamos esta movida, ahora la tenemos que seguir, si no nos hubiésemos movilizado rápido no hubiésemos conseguido nada".
Cuenta Hernández que en Allen se hicieron más de 100 declaraciones juradas por pérdida de Williams, se declararon cerca de los 3.500.000 kilos de esa variedad de pera. "Me sorprendió cómo los productores no fueron antes a la Cámara a decir qué hacemos que tengo toda la pera en la planta. Hasta que no vimos las declaraciones no imaginábamos que sería tal la pérdida, por eso es importante que los productores se acerquen y participen".
"Ahora tenemos que ver qué paso seguimos, porque no sólo se trata de firmar una declaración jurada y esperar que llegue el Estado con la ayuda. El Estado ya dijo que no puede asistir más al sector, y hay que tener en cuenta que esta declaración jurada no es igual a la de granizo o a la de helada, que están establecidas en la ley. Y no está porque nunca en la vida pasó algo como lo que pasó este año. ¡Este año ves fruta de primera en la planta! ¡Nunca pasó!
De cualquier manera no es fácil esta instancia que se abrió por 90 días. "Hay productores que no vendieron ni un kilo ¿de dónde van a sacar plata si no vendieron nada? Tienen que tener un resto para levantar la cosecha y asumir un riesgo si es que salen a vender su fruta o si quieren embalarla. Otra cosa, todo sube pero la fruta vale lo mismo que hace una década atrás, hace 10 años valía 0,22 centavos de dólar... Pero bueno, estoy dispuesto a invertir horas de mi tiempo en la Cámara. Ahora deberíamos aprovechar el invierno, cuando nuestras plantas descansan, para debatir y tomar decisiones, así esto que ocurrió este verano no vuelve a pasarnos".