Uruguay se encuentra abocado a la búsqueda de estrategias que le permitan este año atenuar la merma de las exportaciones de carne, principal rubro del comercio exterior del país, derivada de la crisis financiera global y del cambio climático regional, señalaron fuentes oficiales.
"La preocupación excede las dificultades de colocación propias de la coyuntura económica internacional y se centra en potenciar la eficiencia de la producción local, producto de la ausencia de lluvias", dijo a la AFP el vicepresidente del Instituto Nacional de Carnes (Inac), Fernando Pérez Abella.
Una sequía prolongada e inédita en 50 años en Uruguay, Argentina, Paraguay y el sur de Brasil ha provocado mortandad de ganado y genera una disminución en la producción de los sectores cárnico y lácteo, lo que llevó al gobierno uruguayo a decretar el pasado 12 de enero el estado de "emergencia agropecuaria".
En el 2008 las ventas de carne uruguaya alcanzaron el record histórico de ingresos de divisas al país, con u$s 1.339 millones, que representaron el 22,2% del total de las exportaciones.
"Las cifras de volumen y precios del 2008 quedarán en el pasado como un hito, ya que si bien no tenemos todavía estimaciones oficiales de porcentajes, se aguarda una disminución significativa", reconoció Pérez Abella. Ya en la primera quincena de enero las exportaciones del sector cayeron un 33% respecto de igual período del año anterior. No obstante, el funcionario fue optimista acerca de la reactivación, durante el presente año, de importantes mercados como Estados Unidos, Rusia, México, Canadá y Corea del Sur. Con casi el 40% del volumen físico, Rusia fue en el 2008 el principal destino de las exportaciones cárnicas de Uruguay.