BUENOS AIRES (DyN).- Analistas del sector agropecuario recomendaron a los productores del campo que no se endeuden en esta etapa "aún indefinida" de la crisis financiera global, durante la cual vaticinaron que la oferta crediticia será cara y escasa.
En esa línea, y durante una jornada técnica sobre el comercio granario, los expositores coincidieron en afirmar que "hay que prepararse para una crisis que va a durar mucho tiempo", así como que el gobierno tendrá que desarrollar su gestión en un terreno "desconocido", indicaron en un documento difundido al término del encuentro.
Asimismo, el economista Raúl Fuentes Rossi alertó de que "la situación económica no le va a ayudar en las elecciones del 2009", (a las autoridades nacionales) al considerar el panorama macroeconómico argentino. Respecto del impacto que ese escenario tendrá en la producción agropecuaria del país, coincidió con sus pares en considerar que el crédito será escaso y costoso, así como en que "habría que evitar el endeudamiento en dólares o en pesos a tasa flotante".
La jornada también arrojó como posición que, en caso de ser necesario un préstamo, debería tomarse por montos acotados, y puso de relieve que existe un "riesgo potencial de cobranza en el futuro, proveniente de empresas muy apalancadas con crédito", indicaron los disertantes.
Fuentes Rossi remarcó que habrá que repasar la empresa y hacer sintonía fina, sobre todo corrigiendo los costos agregados en períodos de mayor rentabilidad. También afirmó que el nivel de demanda local se verá afectado y se prevén "bajos precios de los productos por los efectos negativos de la crisis en China, Brasil y México", entre otros países.
Otra de las posturas que se compartieron durante el encuentro fue la referida a los márgenes agrícolas y a los resultados económico-productivos, ya que se prevén en caída y afectados por la localización de la empresa, el tipo de producción y su productividad. En el nuevo contexto los productores deberán invertir sólo para producir más con menos y las inversiones deben estar destinadas a aumentar la productividad, consideraron los analistas sectoriales. Además, evaluaron que la magnitud de la crisis dará fundamentos para "medidas intervencionistas del gobierno, con ruptura de principios históricos.
"Se generará el campo propicio para fuertes distorsiones en los mercados y el Estado estará ausente para defender al sector agropecuario de la crisis internacional, pero seguirá exigiéndole recursos", acotó Rossi.