El gobierno de Estados Unidos ofreció esta semana mejorar su oferta en materia de reducción de subsidios distorsivos al agro, aunque Brasil, Uruguay y la Unión Europea le reclamaron un mayor nivel de ambición para destrabar la ronda Doha de la Organización Mundial del Comercio (OMC).

Ésos fueron los pasos de la negociación más importantes en la Reunión Ministerial de la OMC que se llevó a cabo en Ginebra y a la que asistió el canciller Jorge Taiana. En rigor, lo que ofreció el gobierno norteamericano fue reducir de 17.000 a 15.000 millones sus niveles "consolidados" de subsidios que distorsionan los precios de los productos agrícolas. El nivel consolidado opera como un "techo" hasta el cual se puede subsidiar a los productores, el que difiere del realmente aplicado por el

gobierno de George Bush, que en el 2007 llegó a 8.000 millones de dólares. En otras palabras: Estados Unidos pretende asegurarse la posibilidad de incrementar sus ayudas distorsivas en 7.000 millones de dólares. "A cambio de un acceso ambicioso a los mercados, estamos dispuestos a reducir nuestro apoyo interno que distorsiona el comercio a 15.000 millones de dólares", dijo la representante estadounidense de Comercio, Susan Schwab, en una rueda de prensa en Ginebra.

La funcionaria pidió también, como contrapartida, que los demás países se comprometieran a abstenerse de entablar demandas judiciales contra Estados Unidos ante la OMC por cuestiones vinculadas con los subsidios agrícolas.

Frente a ello, el canciller de Brasil, Celso Amorim, afirmó que si bien la iniciativa norteamericana va en "sentido correcto" tiene "un nivel bajo de ambición. Voceros del Grupo de los 20 -que integra la Argentina- indicaron que las naciones agrícolas le pidieron a Washington que profundizara su ofrecimiento a 13.000 millones de dólares. En la propuesta realizada por el neozelandés Crawford Falconer, presidente de la Comisión de Agricultura, se insta a la Unión Europea a reducir sus ayudas distorsivas de 110.300 a 27.600 millones de euros.

Otro tema que se discute en agricultura es el del acceso a los mercados a través de la rebaja sustancial de aranceles, un asunto respecto del que los países desarrollados ya adelantaron que no modificaran su postura. (AP)