Finalizado el primer semestre del año, las estadísticas privadas muestran claras tendencias sobre el desempeño de las principales empresas regionales en las últimas temporadas. Muchas ganaron terreno en sus ventas desde la salida de la convertibilidad producto de la llegada de los containers al comercio frutícola, mientras otras ceden espacios frente a la coyuntura negativa que presenta la continua baja de la producción local.
Los datos consignados en las infografías de estas páginas toman en cuenta exclusivamente las exportaciones de peras y manzanas, especies éstas que representan cerca del 95% de los productos embarcados por el puerto rionegrino de San Antonio Este.
En este sentido también hay que destacar que, en promedio, el 65% de las exportaciones de las peras y manzanas regionales sale hoy por este puerto patagónico y de ahí que éste puede ser considerado como uno de los referentes estadísticos del sector. Sin embargo ésta no deja de ser una estadística parcial y marca sólo una de las tantas tendencias del sistema frutícola regional en el comercio exterior.
Con la salida de la convertibilidad, la situación de las economías regionales cambió radicalmente. Por un lado, la devaluación permitió una importante mejora competitiva de las exportaciones. Por otra parte, la pesificación de las deudas luego de romper el corsé cambiario liberó a muchas empresas de caer en convocatoria de acreedores. Sin dudas, la salida del uno a uno fue una bocanada de oxígeno para todo el sistema frutícola. Sin embargo, los beneficios generados inmediatamente después de la devaluación fueron perdiendo espacio a medida que pasaron las temporadas, producto de los mayores costos que debió afrontar el sector. Para muchos empresarios, la competitividad de la paridad cambiaria se terminó de perder este año, por lo que pronostican serias dificultades de continuar esta tendencia.
Durante la temporada pasada, los embarques hacia los mercados de ultramar (por San Antonio y Buenos Aires) concentraron el 75% de las exportaciones de peras y manzanas de todo el país. El 23% de las ventas externas partió de la región vía terrestre hacia Brasil y el restante 2% fue orientado hacia otros países latinoamericanos.
Cuando se analizan las colocaciones de fruta en Brasil (segundo destino después de ultramar) y la participación de las empresas en este mercado, se observa una marcada diferencia respecto de las salidas por San Antonio. Sobre los envíos al país limítrofe, las 10 primeras empresas concentran cerca del 40% del total de los envíos a ese destino, un valor muy alejado del 82% que muestran los embarques hacia ultramar. (Ver recuadro "Alta concentración")
Las estadísticas muestran cómo evolucionaron las ventas externas de las diez primeras empresas regionales despachadas por San Antonio, tomando como referencia la temporada 2001 como base 100.
Claramente se observa que existe un punto de inflexión en el desarrollo del comercio de las empresas durante la temporada 2005. En general, todas venían mostrando importantes tasas de crecimiento hasta ese año. Producto de la crisis de sobreoferta en el mercado ruso y de la baja de producción local a partir de esa temporada, las exportaciones en muchos casos mostraron ajustes a la baja. Varias de las empresas pudieron recuperarse a partir del 2007. Toda la estadística, para su análisis.