BUENOS AIRES.- Los embarques de arándanos subieron significativamente este año, manteniéndose Estados Unidos como principal destino. Sin embargo, este avance no se ha reflejado en los retornos de la industria, que cayeron en forma importante. En el sector reconocen que las devoluciones han afectado de forma gravitante los números.
Producto de las alteraciones climáticas y problemas de coordinación logística, las frutas perdieron calidad y llegaron en un estado muy blando a su destino. Una fuente de la industria reconoce que algunas "incluso llegaron molidas". Varias compañías de Chile y Argentina optaron por no enviar toda su fruta, anticipando que era una apuesta muy arriesgada.
Maritza Soto, analista de mercado de Decofrut, explicó que éste es el primer año en que se notan los efectos del explosivo crecimiento que ha tenido el segmento en el último tiempo. "Con el aumento en los volúmenes, los precios disminuyeron y los importadores también se ponen más exigentes. Todo finalmente disminuye la rentabilidad del negocio", señaló.