Pareciera que en el conflicto entre el campo y el gobierno no se avizora una solución inmediata. Ambos sectores están a la defensiva. Los referentes del agro aseguran que mantener a los productores a la vera de las rutas es mostrarle al gobierno que continúan las negociaciones pero que deben existir respuestas a los reclamos para que no comiencen los cortes. Se supo este fin de semana que Luciano Miguens participó en una reunión reservada con algunos productores de la Sociedad Rural en la que señaló la necesidad de reorientar los reclamos de las organizaciones del agro. "Las retenciones móviles no las van a dar de baja. El gobierno no tiene hoy caja para aguantar fiscalmente el tema", aseguran que señaló Miguens. Pero, por otro lado, los productores son conscientes de que el gobierno está trabajando contrarreloj. Es que el 25 de este mes CFK relanzaría su gabinete y en virtud de ello dio la orden de que el conflicto del campo debe estar solucionado antes de esa fecha. "Sabemos que el factor tiempo cuenta a nuestro favor, y hoy los efectos del desgaste los tiene el gobierno", habría señalado Miguens en esa reunión. Las especulaciones son muchas y variadas. Se habla de la salida de Alberto Fernández y de Javier de Urquiza, entre los anuncios oficiales del 25. El gobierno no quiere que estas salidas den la idea de que conflicto del campo se llevó otros dos funcionarios. Si por CFK hubiese sido, el ex ministro Lousteau se habría quedado al frente de Hacienda hasta esa fecha. Pero Lousteau jugó su propia carta y por ello fue condenado por el oficialismo. En estos días el diputado Felipe Solá fue mencionado como el futuro sucesor de De Urquiza, pero fuentes allegas al legislador aseguraron que él no estaría dispuesto a aceptar el cargo mientras Echegaray permanezca al frente de la ONCCA.
