Producir carne proveniente de feed-lot supone, sin dudas, mayores costos que ofertar aquella que se obtiene en campos de secano.
La clave es que la carne de feed-lot aparece en momentos en que no hay oferta disponible en aquellos campos. Esto da lugar a precios diferenciales a la hora de comparar las cotizaciones entre uno y otro sistema de producción.
"La brecha es del 30%. Ése es el piso que conseguimos nosotros con el feed-lot entrando en el mercado entre junio y diciembre de cada año", destaca Jürgen Julio Berger. Datos relevados en Valle Medio dan cuenta de que a campo hoy se están pagando 3,70 pesos por kilo y por hacienda de feed-lot se obtiene un piso de 4,70 pesos.
El gran diferencial se da por la carne con hueso, que en el período mayo-diciembre escasea en toda la región de la Norpatagonia ya que del norte de la barrera sólo puede entrar carne deshuesada. La carne sin hueso la manejan los supermercados. Gran parte de su oferta llega de Buenos Aires y La Pampa. Ahí el feed-lot tiene dificultades para competir. El tema está en la carne con hueso, por la que se obtienen valores diferenciales muy importantes.
(Redacción Central)