La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARPAB) volvió a ratificar el jueves la continuidad de la protesta que viene realizando desde el 30 de abril, a pesar del acuerdo que se selló el miércoles entre el gobierno y la cadena comercial de la carne.

La aceptación oficial de la propuesta del campo y la industria frigorífica, elevada a las autoridades hace una semana, no conforma a los ruralistas pampeanos quienes salieron a reiterar, a través de su conducción central, que la medida de fuerza finalizará el lunes próximo a la cero hora. La medida de fuerza ruralista no se reflejó el día del anuncio en el Mercado de Liniers, debido a que los jueves no se remite hacienda al ente concentrador. Al ingresar en la jornada número once del lock out comercial impulsado por CARPAB, en reclamo de políticas estructurales para el desarrollo ganadero nacional, la entidad informó que se mantenía "muy alto" el grado de adhesión sectorial a la protesta que "habían solicitado las mismas bases", señaló el secretario general del nucleamiento, Jorge Srodek.

Entre tanto, desde la presidencia de la entidad, a cargo de Pedro Apaolaza, consideraron que "el gobierno sigue huyendo hacia adelante", así como que los precios convalidados el miércoles para comercializar la hacienda en pie y los cortes vacunos en góndola "ya fueron superados por la realidad", en referencia a los valores que paga el consumidor final en la actualidad.

CARPAB también reiteró que, además del alto acatamiento que viene sosteniendo la medida, dada por el acompañamiento de los productores ganaderos de Buenos Aires y La Pampa, en la semana se sumaron otras regiones del país.

Respecto del lock out, los gremialistas del ruralismo pampeano dijeron que la jornada de protesta "simboliza el grito de un sector que no se permite desaparecer".

En la misma línea, pusieron de relieve, a través de la difusión de un documento, que "aquí debería estar claramente el gesto de las autoridades nacionales, implementando a la brevedad las medidas que este sector integrador de la matriz productiva del interior del país necesita". "Debemos dejar de huir hacia delante, discutiendo, propiciando y firmando acuerdos inviables, donde se fijen bandas de precios y se mantenga el control sobre los mercados", subrayaron desde CARPAB.