Interna. Trascendió de confiables fuentes del Senasa que la interna que mantiene este organismo con la provincia de Río Negro pareciera que no tiene retorno. Según se supo, el Senasa está exigiendo el pleno control de los programas sanitarios en la región entre los que se encuentra la carpocapsa. Desde la Secretaría de Fruticultura aducen que son todos temas donde se "inmiscuye" innecesariamente la política. En la última reunión que mantuvieron los distintos actores en Buenos Aires transcendió que el Senasa presentó un reservado informe señalando la duplicidad de trabajos que hoy existen en la región y los recursos "extras" que lleva esa carga de ineficiencia en el programa de lucha contra el control de la carpocapsa. Los técnicos de la provincia de Río Negro señalan que esta ofensiva por controlar el programa viene siendo propiciada desde hace tiempo por el representante del organismo nacional en la región. Consultadas las fuentes del Senasa, las mismas aseguran que en los próximos días podrían existir "cambios, los que serán anunciados oportunamente". Las críticas en este sentido apuntan a que la mayor parte de los recursos para los planes sanitarios en la región son aportados por la Nación y que hoy no se cumplen plenamente con las premisas acordadas en el programa para el control de la carpocapsa. ¿Habrá que esperar novedades para los próximos días?

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Alivio. Con alegría algunas empresas de la región tomaron la nueva notificación del Banco Central por la cual se amplía a un año el plazo para ingresar en el mercado de cambios las divisas asociadas al financiamiento con el exterior, independientemente de su monto. Anteriormente, los tomadores de préstamos del exterior disponían de un plazo de 30 días para liquidar los fondos, plazo que se extendía hasta 90 días en caso que los mismos superaran los 50 millones de dólares. El nuevo régimen dota de mayor flexibilidad al sector privado para administrar su fondeo en el mercado al poder decidir con mayor margen la mejor oportunidad para ingresar dichos fondos al mercado local de cambios. Para los empresarios, un alivio. El gobierno por su parte, especula que esos dólares queden afuera transitoriamente para que no presionen en la plaza local sobre el valor del peso.