En enero el precio de la carne vacuna que releva el INDEC para la elaboración del Indice de Precios al Consumidor (IPC) registró un alza de 0,7% mensual, que se agregó a las subas de 1,6% y 4,4% registradas en los dos meses anteriores. Así lo destaca en su informe la Cámara de la Industria de Carne (Ciccra) en el que se detalla que el índice quedó a sólo 1,2% del máximo alcanzado en marzo del año pasado, mes en que se decidió suspender transitoriamente las exportaciones de carne vacuna.
Hay que destacar, en este sentido, que la toma de muestras de precios que realiza el INDEC se hace fundamentalmente sobre supermercados y no sobre las carnicerías, donde se observan subas mucho mayores a las registradas en los grandes centros de venta. Con esto se quiere decir que el aumento cercano al 7% del período noviembre 2006 a enero 2007 no es el que verdaderamente siente el consumidor cuando va a comprar cualquier corte a la carnicería.
Según datos dados por el sector privado, el precio de la carne aumentó desde noviembre del año pasado más del 25%. Sin embargo, el gobierno se agarra del "índice Moreno" y asegura que la carne sólo subió el 10% en este período a la
espera de una baja a partir de abril próximo. Esto es más una expresión de deseo que una proyección racional de la evolución que puede llegar a tener el mercado.
La desagregación de la medición oficial mostró que los cortes delanteros experimentaron en enero una suba de 0,6% y que quedaron apenas 2,6% por debajo del nivel que exhibían al momento de suspenderse las exportaciones. Por su parte, los cortes traseros registraron un alza de 0,9% mensual y acumularon una caída de 0,5% con relación a marzo del 2006. En los casos de las menudencias y achuras hubo alzas de 0,6% y 0,3% mensuales, respectivamente.