El gobierno argentino está dispuesto a tener un 2007 sin que se produzcan nuevas noticias de compras de frigoríficos nacionales por capitales extranjeros, luego de algunos casos resonantes de ingresos de firmas brasileñas y estadounidenses al mercado cárnico.
"Va a haber sorpresas", prometió a NAP un funcionario del gobierno vinculado con la Secretaría de Agricultura. Las novedades pasan por tratar de restringir las compras a partir de poner algunas trabas fiscales al ingreso de capitales extranjeros en el sector y, a la vez, incentivos para frenar las intenciones de venta de los frigoríficos locales o bien, facilitar la expansión de alguna firma de capital nacional, según explicó la fuente.
Lo primero que mostró el gobierno fue un gesto: el apoyo al empresario José Mattievich, titular de la firma que lleva su nombre y que, con ocho plantas en la provincia de Santa Fe, quedó en el mercado local como uno de los grandes frigoríficos de bandera y principal faenador de capitales nacionales.
Mattievich realizó en Casilda la cena de fin de año para proveedores y clientes, a la que asistieron el secretario de Agricultura, Miguel Campos, el director de la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (ONCCA), Marcelo Rossi, y el agregado agrícola en la Unión Europea, Gustavo Idígoras. "Esta es la respuesta", comentó uno de ellos en referencia a su presencia en la cena al ser consultado sobre si había inquietud en el gobierno por el avance extranjero en el mercado de la carne. Campos aseveró que "Mattievich es una empresa nacional que debemos defender" y que representa "el modelo que tratamos de imponer desde el gobierno nacional: el de la producción. Esta es gente que cree que el país y que tiene muchas cosas para dar", dijo el secretario. (Noticias Agropecuarias)